Indicó que este centro hospitalario es el único de tipo público autorizado para ese tipo de trasplantes, que se abrió en febrero de 1999 con el primero de ellos, además de otros dos privados que lograron ese permiso.
En entrevista, comentó que en el nosocomio tiene una lista de espera de 30 pacientes que no se ha podido mover por falta de recursos para realizar las extracciones de órganos y el elevado costo que significaría para los pacientes asumir la totalidad, que estimó en unos 500 mil pesos en promedio.
Apuntó que en las últimas dos décadas se detectaron casos de pacientes que darían una remuneración económica a sus donantes, pues existe un protocolo que incluye valoración psiquiátrica, sobre todo cuando se trata de alguien que no es familiar.
“La ley pide un acta notariada ante un abogado donde consta que le estás dando voluntariamente el riñón y sin nada a cambio a ese paciente”, apuntó.
Mencionó que de los trasplantes de riñón que se han efectuado, 105 en 20 años, el primer paciente de 1999 se encuentra muy bien actualmente.
El órgano más solicitado para trasplantar en México y en el caso de Tabasco, refirió, es el riñón, pues las enfermedades crónicos degenerativas, principalmente la diabetes y la hipertensión arterial han provocado esa necesidad por la degradación en la calidad alimenticia.