Durante la presentación de los resultados del protocolo de ese procedimiento en pediatría, destacó que la experiencia internacional revela que sólo 3 por ciento de los tratamientos conservadores para atender la obesidad en adolescentes (que incluyen cambio de estilo de vida y seguimiento psicológico) resulta exitoso.
“Está documentado que la expectativa de vida de un joven con obesidad mórbida es de 49 años, si nosotros con la cirugía bariátrica logramos que bajen algo de peso, pero además controlamos la parte metabólica, aumentamos la posibilidad de que vivan 10 o 20 años más”, comentó.
En conferencia de prensa, Nieto Zermeño explicó que debido a los lineamientos de la norma mexicana, los menores de 18 años de edad únicamente pueden ser sometidos a una cirugía de este tipo, a través de un protocolo riguroso como el realizado por ese nosocomio.
El proceso quirúrgico al que se sometió un grupo de personas para el estudio, fue el conocido como manga gástrica, cuyo éxito es de 68 por ciento, y consiste en quitar 80 por ciento del estómago.
Una de las ventajas de este procedimiento es que después de la cirugía, el paciente carece de hambre, además disminuye las comorbilidades (dos o más trastornos o enfermedades).
La jefa del Departamento de Alergias e Inmunología, Blanca del Río Navarro, señaló que la elaboración del protocolo tardó cerca de dos años, porque en él se integraron todos los lineamientos requeridos. El objetivo fue valorar la seguridad de este tipo de cirugía en los niños que habían fracasado en su intento para bajar de peso de manera adecuada, y que además tenían enfermedades metabólicas como hipertensión, diabetes, entre otras.
Otro de los propósitos además de bajar de peso era mejorar el perfil metabólico de los pacientes, “la mitad que bajaran el exceso de peso y que el 70 por ciento ya no tuviera comorbilidades como presión o azúcar alta".
Blanca del Río subrayó que antes de la cirugía bariátrica, los pacientes se sometieron a una etapa previa de un año y medio, tiempo en el que se consideró que si los sujetos de estudio no descendían el suficiente índice de grasa o glucosa, durante este tiempo, serían evaluados para la cirugía bariátrica.
Betzabe Salgado Arroyo, licenciada en nutrición, destacó que los primeros seis meses previos al protocolo de cirugía realizaron una investigación para identificar los hábitos alimenticios en los jóvenes. “Lejos de restringir, se les dijo a los chicos qué hábito querían cambiar y ellos van trabajando junto con la psicóloga en terapia familiar en este sentido”, comentó.
Uno de los objetivos en esta etapa, dijo, fue enseñarles cómo preparar y comprar los alimentos, además recibieron clases de cocina de gente ocupada, de cómo organizarse y de comer en familia.
La experta adscrita al servicio de Nutrición del Hospital Infantil de México precisó que, semanas antes de ser operados los jóvenes, se sometieron a un reto que consistía en no masticar alimento, sólo podían tomar licuados con proteína, ya que después de la cirugía serían sometidos a una dieta líquida.
Luego de la intervención quirúrgica, los pacientes tuvieron un plan de alimentación para que aprendieran a comer de forma saludable, correcta y familiar.
De manera aproximada se les cambió la comida cada mes, que inició con una bebida alta en proteína, después papillas, luego picados finos, hasta llegar al alimento sólido, asimismo, se les otorgaron suplementos de vitaminas como B12, calcio y zinc.
Todos los sujetos de estudio en este protocolo tenían un promedio de peso de 117.3 kilogramos, algunos de los pacientes fueron diagnosticados con diabetes mellitus tipo ll, así como diversas enfermedades asociadas a la obesidad mórbida.
El médico adscrito al Departamento de Endocrinología del Hospital Infantil de México, Mario Molina Díaz, manifestó que entre las conclusiones del manejo integral de la obesidad mórbida por cirugía bariátrica, destaca la disminución del peso corporal sin desarrollar carencias nutricionales, mantenimiento del peso reducido a largo plazo.
Jaime Nieto Zermeño hizo hincapié en que se debe hacer más investigación sobre los beneficios de la cirugía bariátrica en jóvenes.