Santiago de Chile, enero (SEMlac).- El aporte político del feminismo como paradigma transformador de la sociedad y la cultura fue destacado aquí por la académica feminista Marcela Lagarde, en la segunda jornada de la III Cumbre Iberoamericana de Agendas Locales de Género.
"Si no se tiene conciencia de género feminista, no se está empoderada; se puede ser poderosa, pero se sale del cargo y se pierde el poder", explicó Lagarde e invitó a conocer el feminismo y nombrarlo, "sintiéndonos orgullosas de contar con ese paradigma para nuestra propia vida y el mundo", agregó.
Criticó a las mujeres políticas que señalan no ser feministas sino femeninas, puesto que "las feministas llevamos mucho tiempo desmontando lo femenino" y señaló que las mujeres "no somos cuidadoras por excelencia", por lo que hay que desnaturalizar los roles de género impuestos.
Insistió en que "lo primero somos nosotras, no cuidar, sino el desarrollo propio y que cada mujer tenga la fuerza de hacer lo que quiera con su vida", por lo que el cuidado debe ser un trabajo compartido social e institucionalmente.
Lagarde llamó la atención sobre la violencia a la que se ven expuestas las mujeres al participar en política, "formas específicas de violencia política con improntas de género", recordando a Gisela Mota, alcaldesa de Temixco, Morelos, asesinada al poco tiempo de haber asumido su cargo en lo que Marcela Lagarde calificó de "feminicidio político".
"No se le llama violencia a muchas formas de violencia y las mujeres nos tardamos en darnos cuenta que estamos viviendo violencia y las instituciones no consideran que eso que llamamos violencia sea un problema público", indicó Lagarde.
Sobre México, la feminista señaló: "mi país está echado a perder, pero no todo, porque no funcionan las instituciones", refiriéndose a la violencia que existe en el país y señaló que la agenda de las feministas actualmente es plantear "la vigencia del Estado de derecho y desarrollar una cultura de la paz".
Por: Tamara Vidaurrázaga Aránguiz