Ciudad de México. En vísperas del “Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra Mujer” que se celebra el 25 de noviembre de cada año, es necesario recordar que las mujeres víctimas de algún tipo de violencia de género han utilizado su resiliencia y fuerza para transformar su dolor en una lucha, impulsar cambios y apoyar a otras mujeres para así hacerle frente al sistema patriarcal, a los estereotipos machistas y a la ineficiencia de las autoridades mexicanas.
Al participar en el programa “Análisis Feministas” de Radio Violeta, la sobreviviente de un ataque de ácido y defensora de los derechos de las mujeres, Carmen Sánchez Flores, explicó que luego de haber sido agredida con ácido por su expareja en 2014, en el Estado de México, sufrió más violencia y discriminación por parte de las autoridades y la sociedad, esto la dejó en una condición de vulnerabilidad, pues no encontraba trabajo y se sentía rechazada.
Estas sensaciones, dijo Sánchez, la impulsaron a desarrollar y crear la “Fundación Carmen Sánchez MX”, que comenzó a funcionar en enero de 2021, con la cual busca ayudar a otras mujeres que hayan sido víctimas de un ataque con ácido, a fin de que ellas dispongan de un personal médico especializado en este tipo de atentados, pues un grave problema es el desconocimiento y falta de protocolos dentro de los hospitales para atender los ataques con ácido.
Cabe recordar que resultado del ataque, Carmen Sánchez se ha realizado más de 60 cirugías para reconstruir su rostro y estuvo en riesgo de perder un ojo, a pesar de ello las autoridades del Edomex calificaron el delito como “lesiones graves”. Desde entonces, Sánchez ha insistido a los congresos de los estados de México que este tipo de atentados sean investigados como tentativa de feminicidio dentro de los Códigos Penales, ya que buscan terminar con la vida de la víctima.
Al respecto, organizaciones civiles que trabajan en contra de los ataques con ácido han denunciado que las autoridades no tienen datos sobre el número de mujeres atacadas con ácido, sin embargo ellas conocen 24 casos, por lo que han llamado a que se trabaje a favor de estas víctimas: accedan a servicios médicos o psicológicos gratuitos y reciban ayuda legal, pero nada de ello ha sucedido.
“Este ataque con ácido fue la culminación de diversas violencias que había vivido en mi vida. Antes del ataque tenía una familia, dos hijas, y un hombre con el que compartí 10 años. Fue algo muy doloroso que el hombre que en algún momento dijo amarme, fue el mismo que me dañó de esta manera. No imaginé esto, aunque dentro de esta relación hubo violencia y denuncié en 3 ocasiones, sin embargo las instituciones me negaban mis derechos”, declaró la defensora.
Este actuar de las autoridades, comentó Sánchez, es una muestra que el Estado mexicano no protege a las mujeres y no respeta sus Derechos Humanos. En respuesta de ello, las mujeres de diversas partes del país se han organizado, creado redes de apoyo, fortalecido para evidenciar las violencias que las afectan.
Sánchez Flores resaltó que gracias a su activismo social y a las mujeres que la respaldan es como consiguió que después de siete años, en mayo de 2021, la Fiscalía General de Justicia del Estado de México detuviera a su agresor, por lo que espera que la institución investigue con perspectiva de género el caso y este marque un precedente en materia de Derechos Humanos de las mujeres.
Buscar a nuestras hijas
En México hay 233 mil 214 personas desaparecidas, de las cuales 23 mil 506 son mujeres. Ante esta problemática los grupos de madres buscadoras han nacido en distintas partes del país, uno de ellos es el colectivo “Solecito Veracruz”, del cual es integrante Rosalia Castro, quien desde el 24 de noviembre 2011 busca a su hijo. “Él venía a la cena de navidad y no llegó”.
Desde entonces, dijo Castro, ella comenzó a llamar, buscar y acudir a los lugares posibles donde pudiera estar su hijo y sin darse cuenta se convirtió en una buscadora independiente y más tarde en defensora de los Derechos Humanos. “Una anda sola, desorientada, sin que te hagan caso las autoridades. No me querían tomar la denuncia porque era día festivo. Me la tomaron hasta el 26 y no hubo una búsqueda inmediata”.
Castro contó que poco a poco varias madres se iban agrupando porque se encontraban en las antes Procuradurías Generales de Justicia, hoy las Fiscalías Generales de Justicia, ya que todas iban por el mismo motivo y es así cómo crearon en 2014, el colectivo “Solecito Veracruz”, que hoy cuenta con más de 40 personas, que dan acompañamiento, asesoramiento y enfrentan las irregularidades de las autoridades.
“Una confía en las autoridades. Yo pensaba, me lo van a resolver, me lo van a buscar, es mentira. La autoridad es una falacia. Pero cuando una entra a un colectivo tiene una nueva familia. Yo ya tengo mi nueva familia. Si una se pone mal, todas apoyamos. Te sientes cobijada. Yo no soy psicóloga pero si mi teléfono suena en la madrugada, yo debo dar contención porque yo ya lo viví y son momentos de desesperación”, detalló.
Todo este mar de sentimientos es lo que ha llevado a Castro y a las demás madres a luchar aún con el paso del tiempo que todos y todas las personas desaparecidas sean buscadas. “Sacamos la fuerza del amor por nuestros hijas e hijos, los buscamos en fosas clandestinas, en anuncios anónimos que nos llegan, algo que nunca pensé”.
Actualmente Castro se reconoce como una mujer valiente que ha aprendido a vivir con el dolor y utilizarlo como un estímulo porque lamentablemente esta problemática sucede aún en el país.
Cónyuge dedicada al hogar
La abogada de la “Red de Abogadas Feministas”, Brenda Cristal González explicó que el pasado 10 de noviembre, la Primera Sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) determinó que, en caso de divorcio, el cónyuge que se haya dedicado principalmente al hogar y a la crianza de las y los hijos, recibirá una indemnización económica de hasta 50 por ciento de los bienes adquiridos durante el matrimonio, celebrado bajo el régimen de separación de bienes.
La decisión de la SCJN, explicó, deriva de un juicio de amparo directo en el que una mujer planteó la inconstitucionalidad del artículo 162 del Código Civil del Estado de Veracruz por no prever el pago de una pensión compensatoria sobre los bienes adquiridos durante el matrimonio. En su falló, dijo, la Primera Sala estableció que de “conformidad con el principio de igualdad entre cónyuges”, la pareja dedicada a el hogar y la crianza debida recibir 50 por ciento de los bienes.
De esta forma, agregó, la SCJN devolvió el asunto al Tribunal Colegiado competente para que dictara una sentencia en la que considerara procedente la compensación a favor de la mujer. En su opinión, este fallo permite que las mujeres puedan tener un respaldo económico luego de un divorcio y eso les ayude a acceder a otros derechos.
Para Cristal González este es un avance hacia la igualdad de género, pues son las mujeres quienes siempre cumplen con este papel de cuidar a las y los hijos y cumplir con las tareas del hogar. Ellas se ven obligadas a vivir jornadas dobles o triples sólo por pertenecer a cierto género.