“También hay espacio para fortalecer el cumplimiento de las normas laborales y ambientales y aumentar el contenido nacional requerido para automóviles y otros productos”, añadió el rotativo en un editoral.
Expuso cómo se podría mejorar el TLCAN, en un artículo de opinión firmado por Mack McLarty, jefe de gabinete de la Casa Blanca y enviado especial para América bajo la adminsitración del expresidente William Clinton; y Penny Pritzker secretario de Comercio en la administración del exmandatario Barack Obama.
Ambos sugirieron que los negociadores estadunidenses en el TLCAN, acuerdo firmado por Canadá, Estados Unidos y México, no deben lanzar barreras al comercio ni aplicar nuevos impuestos fronterizos, ya que causaría daños colaterales a millones de trabajadores y consumidores estadunidenses.
Sin embargo, el acuerdo comercial, que entró en vigor el 1 de enero de 1994, "necesita una actualización. Cada uno de nosotros se esforzó durante los gobiernos de Clinton y Obama para mejorar el TLCAN, para servir mejor a los trabajadores y consumidores estadunidenses”, recordaron ambos exfuncionarios.
“Vemos la oportunidad de aprovechar este momento político desafiante y hacer crecer la economía de Estados Unidos de una manera que beneficie a más estadunidenses, incluyendo aquellos que se han unido al mensaje antilibre comercio del (presidente estadunidense Donald) Trump, al modernizar el TLCAN”, agregaron.
La administración Trump también puede utilizar las negociaciones para promover los intereses estadunidenses en áreas como seguridad regional y migración, añadieron.
“Por supuesto, estos temas ya están en discusión. En los últimos cuatro años, el Diálogo Económico de Alto Nivel México-Estados Unidos estableció un marco compartido basado en los datos para identificar las nuevas necesidades de infraestructura fronteriza", recordaron.
Además, elaboró una agenda común para suavizar las regulaciones comerciales y promovió el flujo continuo de energía a través de la frontera.
Según el Washington Post, el secretario de Comercio, Wilbur Ross, mostró al presidente Trump un mapa que indica áreas de Estados Unidos que se verían perjudicadas por el colapso del TLCAN, incluyendo muchas que son el hogar de los principales partidarios del mandatario.
Canadá es el destino número uno de las exportaciones estadunidenses. El comercio con México apoya seis millones de empleos en Estados Unidos, desde agricultores de maíz en Iowa hasta trabajadores de automóviles en Carolina del Sur.
Trump determinóque renegociaría el TLCAN y con ello no sólo evitó una crisis que habría afectado a la industria manufacturera, los servicios, la agricultura y los consumidores, sino que también reconoció una verdad central sobre el acuerdo comercial que es el cableado que conecta y suministra energía a grandes partes de la economía en Norteamérica.
The Angeles Times consideró que el TLCAN ha sido siempre un medio para un fin más grande que el comercio. "Cimentó lazos con nuestro vecino del norte. Fue fundamental para ayudar a Estados Unidos y a México a salir de un profundo agujero de mutua desconfianza y hostilidad", indicó.
Los dos funcionarios destacaron que "ambos hemos hecho muchos viajes oficiales a México. Hemos sido testigos del deslumbrante cambio en la imagen de los Estados Unidos de negativo a positivo".
El TLCAN "merece gran parte del mérito de transformar a Norteamérica de una región caracterizada por la sospecha, en una donde juntos podemos enfrentar la seguridad transnacional y las amenazas económicas”, destacaron.
“Cualquier próxima renegociación del TLCAN con nuestros vecinos también proporciona una apertura para el autoexamen. Muchos estadunidenses se sienten dejados atrás por la economía global”, señalaron.
“El gran desafío de nuestro tiempo es cómo abordar este problema crítico (...) debemos desarrollar una estrategia sólida e independiente para armar a los trabajadores estadunidenses con las habilidades que necesitan para adaptarse no sólo a la globalización, sino también a los avances tecnológicos", indicaron.
A medida que aprende más sobre las realidades del TLCAN, Trump tiene la oportunidad de mejorarlo.
Al mismo tiempo, nuestra nación debe desarrollar una sólida estrategia nacional de capacitación laboral y fortalecer la red de seguridad para los trabajadores estadunidenses. Eso es lo que "ganar" en lo que el comercio requiere, subrayaron.