Querétaro, 18 Enero 2019.- En el pasado proceso electoral se firmó una agenda mínima de libertad religiosa, por lo que se tiene el compromiso de presentar una iniciativa que incorpore a la Constitución del Estado de Querétaro el derecho humano de libertad religiosa, afirmó Roberto Carlos Cabrera Valencia, presidente de la Mesa Directiva de la LIX Legislatura local.
Durante el Foro Libertad Religiosa y Laicidad, refirió que, para dimensionar la diversidad religiosa el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), establece que en Querétaro el 80 por ciento de la población se considera católica, hay 211 asociaciones religiosas, hay mil 200 agrupaciones religiosas de corte evangélico y la población evangélica está representada por al menos 200 mil personas.
“Existe una responsabilidad legislativa con apego al estado laico, por eso legislamos por el bien común, la dignidad de las personas y el respeto a la pluralidad religiosa con base en el constitucionalismo y el estado de derecho”.
Aseguró que la función legislativa tiene que desarrollarse con una dosis de neutralidad en materia religiosa.
En un estado con instituciones democráticas, detalló, deben abstenerse de respaldar y promover directa e indirectamente credos religiosos particulares, sin embargo, el principio de laicidad del estado convive en la Constitución con el derecho a la libertad religiosa.
Recordó que un estado laico es quien respeta la diversidad, incluyente, promotor de la coexistencia armónica de distintos credos el cual defiende la libertad religiosa, ni estado anticlerical ni estado antireligioso.
Esta libertad, detalló, es un derecho que está consagrado en el artículo 18 de la Declaración Universal de los Derechos Humanos asegura que todos tienen derecho a sus propias creencias, a una religión, a no tener ninguna o a cambiarla.
“Esto es de vital importancia porque en un mundo globalizado hemos visto ejemplos que desbordan el orden y generan violencia ante la falta de tolerancia a la diversidad de pensamiento. Hoy más que nunca se necesita pensar en defender las libertades religiosas porque de lo contrario la radicalidad, fundamentalismo y la falta de respeto a la pluralidad y diversidad se convierten en un obstáculo para promover la paz”.
La importancia de hablar de laicidad y libertad religiosa, explicó, es para identificar la fortaleza de los valores de una sociedad plural y promover el respeto de las libertades y de los derechos de las diversidades religiosas y sobre todo fomentar la participación e integración de quienes piensan distintos a través de reglas que garanticen la sana convivencia.
Faustino Armendáriz Jiménez Obispo de la Diócesis de Querétaro aseguró que el respeto a todo ser humano y a la libertad religiosa es el principio fundamental para abrazar la verdad moral que llama desde el corazón y este no debe ser impuesto, pues únicamente desde la libertad se puede amar de verdad, se puede abrazar la verdad y la fe de manera legítima y plena.
Durante el Foro Libertad Religiosa y Laicidad, el jerarca católico destacó que por ello a la Iglesia Católica le interesa participar en esta actividad porque creen que la libertad religiosa es un derecho humano fundamental y necesario para la fe, y el bien común.
Además, detalló, que se vive en una sociedad democracia plural en la que diferentes cosmovisiones y creencias conviven cotidianamente.
“En este contexto el Consejo Interreligioso de Querétaro es un signo de esperanza, no sólo para los que tenemos fe, sino para todos los miembros de la sociedad queretana. Cuando ministros de diferentes confesiones se reúnen dejando a un lado sus diferencias con el objetivo de trabajar por el bien de todos, se evidencia que existen problemas comunes sobre los que todos estamos preocupados y en los que todos podemos colaborar para solucionarlos”.
Es importante, destacó, que los actores políticos y sociales promuevan y protejan el derecho humano de la libertad religiosa, que no se obligue a nadie a obrar contra su conciencia ni se le impida que actúe conforme a ella en privado y en público, solo o asociado con otro y dentro de los límites debidos.
“La libertad religiosa protege el proceso por el cual la persona de manera individual y comunitaria se plantea las preguntas fundamentales, las respondes y las trata de adecuar a su vida”.
Este derecho, dijo, incluye la libertad de cambiar de religión o creencia, así como la libertad de manifestar su creencia individual y colectivamente tanto en público como en privado, por la enseñanza, la práctica, el culto y la observancia.
Refirió que la libertad religiosa posibilita que las personas encontrando las razones de su existencia encuentren los incentivos para colaborar y construir una mejor sociedad.
“Quien obstaculiza el adecuado ejercicio de la libertad religiosa roba a los ciudadanos de la fuerza moral y religiosa indispensable para comprometerse en el desarrollo humano integral. El ejercicio de esta libertad produce riquezas en la sociedad civil que son indispensables para cooperar con el otro, aunque no crea como yo o no piense como yo”.
Desde el punto de vista del Gobierno municipal, Apolinar Casillas Gutiérrez, secretario de Gobierno del Ayuntamiento de Querétaro, celebró la realización de este foro de discusión donde se realizaron diversos planteamientos de ideas y propuestas.
Consideró que el derecho a la libertad religiosa y de creencia son inalienables de todo ser humano que más allá de la confesión y la forma de expresión será defendible y defendido desde las políticas públicas del municipio.
Destacó que los integrantes del Consejo Interreligioso han coincidido en diversos temas por ello, la obligación del gobierno es atender a todas las expresiones y realizar políticas públicas que preserven, rescaten y garanticen la vivencia de los derechos fundamentales.
Consideró que esto tiene que ver con la tolerancia y respeto a una distinta cosmovisión donde se consolidan acuerdos para llevar a políticas públicas que redunden en beneficio de las personas y sus familias y que sean integrados al desarrollo de la comunidad.