Dijo que las habilidades pictóricas de Salvador Dalí, suelen atribuirse a la influencia y admiración por el arte renacentista, en la cual ha sido reconocido por sus imágenes surrealistas.
Señaló que Dalí a parte de ser uno de los artistas más reconocidos por su pintura, también incursionó en el cine, la escultura y la fotografía, que lo condujo a numerosas colaboraciones con otros artistas audiovisuales.
“Dalí describió un extenso y personal universo simbólico a lo largo de sus obras, no se limitó a la pintura, sino también contribuyó al teatro, la moda, la fotografía y el cine, siendo el protagonista de las disciplinas artísticas”, subrayó.
Haro Ureña externó que la admiración por el arte de Dalí era bajo la influencia del Renacentismo, cuyo objeto era atraer la atención pública, mediante la pasión, el lujo y el amor por la moda oriental.
Una de las pinturas más célebres es ‘La persistencia de la memoria’, realizada en 1931, obra en la que según algunas teorías, ilustró su rechazo del tiempo como una entidad rediga o determinista.
“La imagen pública de Dalí fue sumando todo tipo de rumores sobre sus extravagancias y obsesiones, por lo que no se limitó a la pintura o esculturas y fue uno de los pioneros de la holografía artística”, apuntó.
Otra de las obras más significativas de este artista, son ‘Los relojes blandos’, en la que interpretan una referencia a la teoría de la relatividad de Albert Einstein.
Linda Haro Ureña, subrayó que al incursionar en el cine, Dalí entregó un guión a Jean Gabin, titulado ‘Moontide’, que se convirtió en una de sus obras escritas más importantes en el mundo cinematográfico.
“Dalí mantenía una posición que se juzgaba ambigua en la cuestión de las relaciones entre arte y activismo político”, finalizó.