Química mexicana, considerada para el Nobel

29 de Febrero de 2016
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Cimacnoticias | México, DF.- 29/02/2016-. Con 35 años de carrera como profesora, investigadora y estudiante, la doctora Tessy López Goerne ha ganado múltiples reconocimientos, y el honor de ser considerada una de las mujeres que debería ser nominada al Premio Nobel de Química, según la organización británica The Council for Parity Democracy.

Oficialmente, las nominaciones al Nobel son confidenciales, pero hasta ahora López Goerne ha sido laureada con diversos galardones. Este año recibió el Premio TWAS, que otorga The World Academy Of Sciences, mismo que ha sido entregado a varios Nobel de la época moderna.

A propósito de que el pasado 11 de febrero se celebró el Día Internacional de las Mujeres y las Niñas en la Ciencia, estipulado por la UNESCO, Cimacnoticias conversó con la doctora en Química.

PASIÓN POR LA CIENCIA
Cada vez hay más mujeres que se inscriben en la Universidad, pero aún son pocas las que continúan una carrera en la investigación, y quienes lo hacen se concentran en las Ciencias Sociales y no en la ingeniería y la tecnología, dice el estudio “Mujeres en la ciencia”, elaborado por la UNESCO.

En México, del total de estudiantes de doctorado, el 47 por ciento son mujeres y del total de investigadores, 32 por ciento son de sexo femenino.

Además, las que llegan a ser investigadoras tienden a trabajar en el sector académico (35 por ciento) y de gobierno (30 por ciento), mientras que los varones dominan el sector de la investigación privada, que ofrece mejores salarios y oportunidades de crecimiento profesional.

La doctora López Goerne –de 55 años de edad y semiparalizada del cuerpo debido a un infarto cerebral en 2010– es una de las mujeres que ha conseguido escalar todos estos niveles. Realizó estudios de licenciatura en Fisicoquímica, una maestría en Estado Sólido, y un doctorado en Ciencia de Materiales por la UAM, pero además ha sido profesora-investigadora.

Su principal aporte a la ciencia es en el estudio de las nanoparticulas (partículas microscópicas), con lo cual ha trabajado en la petroquímica, para erradicar la contaminación del agua y el aire, y tratar enfermedades como el pie diabético, la epilepsia, el Parkinson, el cáncer, y la enfermedad de EPOC en los pulmones.

“Tengo 35 años en la UAM. Estuve 25 en Iztapalapa y los últimos 10 en Xochimilco. Decidí ir a la UAM por azares del destino. Soy guanajuatense, y mi papá quería que yo estudiara en la UNAM, sin embargo estaba en huelga y entré a la UAM a finales del 78.

“Empecé mi carrera ahí, hice la licenciatura, la maestría y el doctorado en Ciencias Exactas. Había muy pocas mujeres y una gran cantidad de hombres. Se llamaba la División de Ciencias Básicas e Ingeniería. Terminé siendo casi la única mujer siempre”.

–Anayeli García Martínez (AGM): Pareciera que la ciencia es un área tan complicada que incluso dialogar con científicos se torna difícil.
–Tessy López Goerne (TLG): Depende de la persona, creo que conmigo no es tan difícil dialogar; mis hermanos y mis amigos no se quejan. No hablo de ciencia nunca, cada vez que estoy con alguien que no es científico no hablo de ciencia.

“Dentro del campo científico y tecnológico entonces sí, ahí la pelea es muy dura para una mujer. Haciendo un cálculo tiene que hacer 10 veces más el trabajo que un hombre para que le den el mismo reconocimiento y las que estamos en un buen nivel hemos trabajado mucho. Toda nuestra vida”.

Ser una mujer casada y madre de dos hijos no le impidió a Tessy López seguir su trayectoria profesional. Incluso su primer hijo lo tuvo a los 24 años y asegura que las labores domésticas siempre las compartió con su pareja, que además también es científico.

“Empecé a trabajar mis nanomateriales. Como son átomos y enlaces, pensemos en un rompecabezas; las piezas son esos átomos y esos enlaces, y hay que unirlos de tal manera que se forme la molécula que necesitamos. Así que hay que conocer muy bien las propiedades físicas y químicas de esos átomos y de esos enlaces, y los problemas que se quieren resolver”.

CURA AL PIE DIÁBETICO
En México, desde el año 2000 la diabetes mellitus es la primera causa de muerte entre las mujeres, según el Instituto Nacional de Salud Pública (INSP).

La doctora López Goerne sabe lo que es esa enfermedad, pues una de sus hermanas murió de diabetes infantil, y porque ahora es una de sus líneas de investigación.

“Primero había que ver qué pasa con el pie diabético: es un pie que está lleno de bacterias de diferentes especies y todas ellas conviven entre sí y cada vez van carcomiendo más y más al pie hasta que llega un momento en que el pie es insalvable, y lo que hacen los médicos es cortar primero hasta la rodilla y luego la pierna, posteriormente sigue la otra.

“Ahora que tenemos gente que acude con nosotros, que está todo el tiempo atendiéndose y que sigue las reglas que nosotros les decimos: que sean constantes, que no dejen su tratamiento, etcétera, todo se curan”.

La doctora explica que ha usado las nanoparticulas para hacer un gel con el que se trata el pie diabético, para curar las heridas fáciles de cerrar que después provocan la amputación.

–AGM: Teniendo estas pruebas sobre el tratamiento del pie diabético, ¿la han llamado de alguna institución para apoyarla?
–TLG: Sí, tres o cuatro, el problema es la gente que no viene. Le hablo de 300 pacientes curados, pero no es nada para la cantidad de diabéticos que hay México.

“Si somos el primer país del mundo en diabéticos no son suficientes, son muy pocos y por otro lado, si usted me pregunta si el gobierno nos ha apoyado: no, el gobierno no nos ha apoyado.

“El gobierno federal nos ignora porque no confía en la investigación mexicana, así que si nuestro propio gobierno no confía en la investigación mexicana.

“Tengo trabajo de investigación, de difusión de la cultura, doy clase, así que ya no era posible. Tengo que bajar el ritmo de mis actividades y me quedé con el trabajo donde tenía más experiencia”.

–AGM: ¿Cómo se financia el laboratorio que dirige?
–TLG: El laboratorio es de la UAM, yo lo monté con el dinero de la Comunidad Europea y trabajamos en él dos profesores contratados y todos los demás son alumnos. No tengo apoyo en nuevo personal.

“La universidad no tiene dinero para darnos para investigación, gasta casi todo en sueldos. La universidad no es la culpable, es el gobierno que le da poco dinero para que nos dé para la investigación”.

INVERSIÓN EN CONOCIMIENTO
–AGM: Tiene un campo de investigación muy amplio, ¿ha recibido apoyo de instancias gubernamentales para desarrollarlas?
–TLG: No. Tuve un proyecto de la Comunidad Europea; me dieron 2 millones de euros; estuve bastante tranquila con eso porque pude comprar varias cosas para mi laboratorio, que eran necesarias y que siempre pedíamos prestado o regalado, y equipos.

“Se han graduado conmigo 68 alumnos, es decir, alumnos que han hecho investigación y la tesis. La UAM tiene un plan trimestral; yo cada trimestre empecé con 100 alumnos dando clases en el primer trimestre, después pasé al segundo y al tercero donde ya eran 50 y 30 al menos, posteriormente impartí el laboratorio de física y química que tiene 30 alumnos, pero (lo di) durante 30 años.

“He recibido muchas mujeres (para tesis), pero también hombres; doy mucha preferencia a las mujeres”.

En 2010 la doctora López Goerne estuvo tres meses en coma, pero tras recuperarse entró en una fase de rehabilitación. Aunque no se podía mover dice que su mente estaba totalmente clara y escribió un libro: “Introducción a la nanotecnología y la nanomedicina”, y al segundo año escribió “Nanomedicina y cáncer”.

“Mi vida fue la misma, claro que cambia un poco, ahora soy paralítica y no lo era. Muchas actividades que hacía antes no las puedo hacer, pero todo lo intelectual, lo que se hace con la mente, no cambió nada”.

Ahora su más reciente libro es “Nanomedicina y epilepsia”, acaba de terminarlo y está en proceso de revisión para ser publicado. Por: Anayeli García Martínez

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