Ciudad de México, 8 ago (EFE).- El presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, expresó que mantiene la "fe" de salvar con vida a los 10 mineros atrapados en una mina en el norte del país, aunque este lunes se cumplen 5 días del derrumbe y los rescatistas aún no han podido entrar.
"Todos tienen fe, nadie está pensando en otra cosa más que en el rescate, es que tienen mucha fe (las familias y rescatistas). Nos explicaban que, cuando se trabaja en esas minas, los mismos mineros hacen como huecos o refugios", manifestó en su rueda de prensa matutina.
El mandatario defendió que su Gobierno "actuó rápido" desde el miércoles pasado a las 13.35 hora local (18.35 GMT), cuando habitantes del municipio de Sabinas, en el estado de Coahuila, reportaron el colapso de una mina de carbón en la comunidad de Las Conchas, en el paraje de Agujita.
López Obrador explicó que el "problema es que se inundaron los tres pozos" de la mina porque se rompieron las paredes con "otra que estaba abandonada, muy grande, que tiene una acumulación de agua de bastante cantidad".
Por ello, aún resta por sacar agua de un pozo que sigue inundado con un nivel de líquido de 13,80 metros de profundidad en el que se presume que podrían estar los mineros, según el mandatario.
"Se ha avanzado en la mitad del agua, en promedio se están sacando más de 300 litros por segundo, pero eso es lo necesario de acuerdo a los técnicos y estamos apurándonos a sacar el agua para que entren los rescatistas", dijo.
En el lugar hay un despliegue de 557 elementos, incluyendo 357 federales, como 230 de la Secretaría de la Defensa, 2 de la Marina, 32 de la Guardia Nacional, 9 de Protección Civil, y otros de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), la Comisión Federal de Electricidad (CFE) y secretarías de Estado.
Se estima iniciar el salvamento por el tercer pozo inundado "a mediados de esta semana", según expuso Luis Cresencio Sandoval, secretario de la Defensa Nacional.
El presidente afirmó que ha atendido a los familiares de las víctimas, quienes le reprocharon la falta de avances y responsabilidades durante su visita este domingo en la zona.
"La parte judicial ya la está viendo la Fiscalía (General de la República)", prometió López Obrador.
El derrumbe de la mina, de donde solo cinco trabajadores lograron escapar aunque resultaron heridos, recuerda los trágicos accidentes que se han presentado en México en los últimos años.
De acuerdo con la Familia Pasta de Conchos, que agrupa a familiares de mineros fallecidos en el derrumbe de 2006 en la mina de ese nombre, también en Coahuila, se han registrado más de 100 muertes de personas dedicadas a la minería en esta zona de carbón desde entonces.