México, abril (SEMlac).- Las cifras de incidencia delictiva del fuero común 2015-2024, que publica el Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP), demuestran que esta forma de violencia contra las mujeres de entre 0 y 17 años ha disminuido en el país al comenzar el año en curso.
Mientras en enero de 2023 se registraron siete incidentes de este delito contra niñas y adolescentes a nivel nacional, los feminicidios en ambos casos en México disminuyeron a seis en enero de 2024.
Lo anterior implica que mientras que en enero de 2023 se reportaba un feminicidio de mujeres de 0 a 17 años cada cuatro días y medio en el país, para enero de 2024 esta cifra fue de un feminicidio de niñas y mujeres adolescentes cada cinco días.
No obstante, la violencia feminicida con armas de fuego contra niñas y adolescentes no disminuyó en el mismo período: cuando en enero de 2023 se vio un feminicidio con arma de fuego de mujeres de entre 0 y 17 años a nivel nacional, para enero de 2024 se había registrado un feminicidio de niñas y adolescentes con arma de fuego en el país.
En total, de enero de 2015 a enero de 2024 se han reportaron 751 feminicidios de mujeres de entre 0 y 17 años en México, de los cuales 106 fueron con arma de fuego y 114 con arma blanca. De estos feminicidios contra niñas y mujeres adolescentes, 127 tuvieron lugar en Estado de México, 62 en Veracruz y 58 en Jalisco; concentrándose en estas tres entidades uno de cada tres feminicidios de mujeres de entre 0 y 17 años registrados de enero de 2015 a enero de 2024 en el país.
Los feminicidios de mujeres de 0 a 17 años representaban el 9,9 por ciento del total de los feminicidios registrados en el país de enero de 2015 a enero de 2024.
¿Qué se puede hacer para reducir los feminicidios de niñas y adolescentes?
En la Red por los Derechos de la Infancia en México (REDIM) realizamos actividades de incidencia política para promover que el Estado mexicano haga mayores esfuerzos para efectivamente prevenir, atender y restituir esta grave violación a los derechos de la infancia y la adolescencia. A continuación presentamos algunas recomendaciones que hemos generado para romper el ciclo de violencia contra niñas y adolescentes:
A tres años de adoptada la iniciativa Spotlight, en materia de Avances legislativos en torno a la prevención y erradicación de la violencia contra las mujeres y niñas, ya fueron presentados cuatro paquetes de reformas sobre: niñas y niños en condición de orfandad por feminicidio; de feminicidio y feminicidio infantil; además, de incorporar la perspectiva de género en las responsabilidades administrativas y una más en materia de violencia familiar.
Todas estas propuestas ya fueron enviadas a las comisiones correspondientes para su análisis y trámite legislativo y, posteriormente, serán enviadas al pleno para su análisis y aprobación (ONU, 2021). Sin embargo, aún se necesita de mucho impulso e incidencia en el poder legislativo para que estas reformas puedan aprobarse e impacten en universo mucho mayor de leyes que puedan abonar a la protección de miles de niñas, adolescentes y mujeres en el país.
Romper con el ciclo de la pobreza y la violencia es trabajar en contra de la estructura y el sistema patriarcal que ha permitido crear estereotipos y que continúa justificando la violencia estructural que se ejerce en contra de las niñas y las adolescentes. Es necesario informar, no solo a la población, sino también a las personas funcionarias públicas, capacitándolas e incluyendo el enfoque de género en su quehacer diario, ya que el Estado es el responsable de garantizar y proteger los derechos de niñas y adolescentes.
Asimismo, es necesario que los organismos y colegiados ya creados para atender estas problemáticas dentro del Gobierno federal, sean fortalecidos y reactivados.
De igual manera, que se les dote de fuerza política y presupuesto suficiente para lograr que sus iniciativas, acciones y seguimiento a las mismas pueda tener un mayor alcance e impacto en las políticas públicas en favor de las niñas y las adolescentes y que, a su vez, los Colegiados instalados dentro del SIPINNA sesionen de manera periódica, en específico la COMPREVNNA.
Como sociedad es necesario estar dispuestos a hacer un cambio cultural, así como muchas mujeres y hombres dentro de algunas comunidades indígenas, quienes están rompiendo el ciclo de comercialización y venta de niñas. Todas y todos podemos aportar rompiendo el ciclo de la violencia contra las niñas y las adolescentes.
Si quieres apoyarnos promoviendo que el Estado mexicano tome medidas más efectivas para prevenir, atender y restituir los feminicidios de niñas y adolescentes por favor visita nuestras redes sociales: facebook.com/derechosinfancia.org.mx.
Fuente: SESNSP, Incidencia Delictiva del Fuero Común (a enero de 2024).
Análisis de UNICEF
En México, seis de cada 10 mujeres adolescentes de entre 15 y 17 años han sufrido al menos, a lo largo de sus vidas, un incidente de violencia emocional, física, sexual o económica (1).
Niñas y adolescentes enfrentan violencia en todos los espacios que habitan: su hogar, escuela, calles, espacios comunitarios, ciberespacio. Esta violencia proviene tanto de personas cercanas, familiares y amistades, como de personas desconocidas.
Las adolescentes de 12 a 17 años representan 80 por ciento de las desapariciones de personas menores de 18 años en México (2). En 2020, fueron víctimas de feminicidio 112 niñas y adolescentes (de 0 a 17 años), lo que representó 11,5 por ciento del total de feminicidios en el país, con un incremento de casi 18 por ciento respecto a 2019 (3). Además, cuatro de cada 10 adolescentes ha experimentado algún tipo de violencia sexual (4).
Aunado a las altas tasas de feminicidio, desaparición y violencia sexual, entre otras, persisten múltiples barreras relacionadas con su edad que les impiden recibir oportunamente servicios adecuados y acceso a la justicia.
También existen diversas prácticas nocivas que están profundamente arraigadas y basadas estereotipos sobre lo que se cree que es o debe ser una mujer y una niña, lo cual tiene consecuencias a lo largo de sus vidas y manifiesta múltiples formas de violencia en su contra.
Por ejemplo, el acoso y abuso callejero comienza cuando las niñas tienen nueve o 10 años y se intensifica entre los 12 y los 15 años. En 2015, el 98,4 por ciento de matrimonios de personas menores de 15 años registrados en el país se trataba de niñas y adolescentes mujeres con hombres mayores de 18 años (5).
La violencia de género que las niñas y las adolescentes enfrentan tiene particularidades que no siempre quedan manifiestas cuando hablamos de violencia contra la mujer o violencia contra la niñez. Visibilizar las experiencias y riesgos de violencia de género que enfrentan relacionados con su edad, desarrollo y crecimiento, permitirá identificar necesidades de protección y atención específicas para ellas (6).
Voces de las niñas y adolescentes
Las niñas y adolescentes de América Latina y el Caribe han priorizado una serie de problemas que enfrentan diariamente y sus exigencias son:
1. Las niñas y adolescentes demandan vivir libres de violencia
2. Las niñas y adolescentes, y aún más las afrodescendientes, piden que no las cosifiquen y sexualicen
3. Las niñas y adolescentes quieren ser tratadas sin ninguna discriminación
4. Las niñas y adolescentes demandan educación sexual integral
5. Las niñas y adolescentes quieren participar y decidir sobre las cuestiones que les atañen
6. Las niñas y adolescentes necesitan justicia climática para crecer
7. Las niñas y adolescentes deben ser visibles en las estadísticas
Fuente: Derechos de las niñas para un futuro en Igualdad