México, 27 Feb. (Notimex).- Académicos, estudiantes y trabajadores de los cinco planteles del Colegio de Ciencias y Humanidades (CCH) levantaron su voz para expresar este miércoles su rechazo a la violencia, luego de los disturbios del 1, 5 y 6 de febrero.
En una carta leída en los cinco planteles por los directores respectivos, y firmada por integrantes de la comunidad, se pronunciaron porque quienes incurrieron en la violencia asuman su responsabilidad en lo sucedido.
A un día de que se reanuden las conversaciones entre autoridades y jóvenes del CCH para abordar los casos de estudiantes expulsados, los directores de Azcapotzalco, Sandra Guadalupe Aguilar Fonseca; Naucalpan, Benjamín Barajas Sánchez; Oriente, Arturo Delgado González; Vallejo, Roberto Ávila Antuna; y Sur, Jaime Flores Suaste, leyeron el documento en sus planteles respectivos.
Dicho escrito señala que las mesas de diálogo establecidas deben evidenciar el compromiso, por ambas partes, de solución con una revisión fidedigna de lo ocurrido. "Pedimos apertura y disposición en las pláticas".
Agrega que con apego a la legalidad, tras lo acontecido en el plantel Naucalpan, se levantaron denuncias penales y se expulsaron provisionalmente a quienes participaron en los sucesos.
"Conforme a nuestro papel, identificados con los valores y el espíritu universitario, somos partidarios de que los jóvenes sean tratados con diálogo, no con la fuerza, pero igualmente rechazamos la impunidad", señala el documento.
Firmado por más de 21 mil integrantes de la comunidad, se considera que no se debe confundir una protesta o demanda con agresiones, porque atenta contra la integridad física de la comunidad y de sus instalaciones.
Añade que la comunidad de los Colegios de Ciencias y Humanidades ha dado muestras repetidas e históricas de su compromiso y vocación social con la institución y con la sociedad, a través de una postura crítica y propositiva.
Reconocemos que en los últimos años los cinco planteles recibieron apoyos que mejoraron su infraestructura y ello incidió favorablemente en las condiciones de trabajo. No obstante, se trata de acciones insuficientes, que requieren multiplicarse en el futuro próximo.
Con el fin de que la enseñanza en el colegio esté al día e incorpore los avances científicos, las interpretaciones de las transformaciones socioculturales y las necesidades de la sociedad, bajo la coordinación del Consejo Técnico, se realiza un proceso de actualización del Plan y Programas de estudios.
En éste, agrega, participan más de 400 profesores que han consultado a la comunidad y continuarán en esa tarea hasta el 30 de noviembre para garantizar el consenso.
En una carta leída en los cinco planteles por los directores respectivos, y firmada por integrantes de la comunidad, se pronunciaron porque quienes incurrieron en la violencia asuman su responsabilidad en lo sucedido.
A un día de que se reanuden las conversaciones entre autoridades y jóvenes del CCH para abordar los casos de estudiantes expulsados, los directores de Azcapotzalco, Sandra Guadalupe Aguilar Fonseca; Naucalpan, Benjamín Barajas Sánchez; Oriente, Arturo Delgado González; Vallejo, Roberto Ávila Antuna; y Sur, Jaime Flores Suaste, leyeron el documento en sus planteles respectivos.
Dicho escrito señala que las mesas de diálogo establecidas deben evidenciar el compromiso, por ambas partes, de solución con una revisión fidedigna de lo ocurrido. "Pedimos apertura y disposición en las pláticas".
Agrega que con apego a la legalidad, tras lo acontecido en el plantel Naucalpan, se levantaron denuncias penales y se expulsaron provisionalmente a quienes participaron en los sucesos.
"Conforme a nuestro papel, identificados con los valores y el espíritu universitario, somos partidarios de que los jóvenes sean tratados con diálogo, no con la fuerza, pero igualmente rechazamos la impunidad", señala el documento.
Firmado por más de 21 mil integrantes de la comunidad, se considera que no se debe confundir una protesta o demanda con agresiones, porque atenta contra la integridad física de la comunidad y de sus instalaciones.
Añade que la comunidad de los Colegios de Ciencias y Humanidades ha dado muestras repetidas e históricas de su compromiso y vocación social con la institución y con la sociedad, a través de una postura crítica y propositiva.
Reconocemos que en los últimos años los cinco planteles recibieron apoyos que mejoraron su infraestructura y ello incidió favorablemente en las condiciones de trabajo. No obstante, se trata de acciones insuficientes, que requieren multiplicarse en el futuro próximo.
Con el fin de que la enseñanza en el colegio esté al día e incorpore los avances científicos, las interpretaciones de las transformaciones socioculturales y las necesidades de la sociedad, bajo la coordinación del Consejo Técnico, se realiza un proceso de actualización del Plan y Programas de estudios.
En éste, agrega, participan más de 400 profesores que han consultado a la comunidad y continuarán en esa tarea hasta el 30 de noviembre para garantizar el consenso.