Al hacer los primeros recorridos por esta vía, tanto en automóvil como a pie, el funcionario capitalino refirió que la obra cuenta con un sistema de seguridad única en el país, con un sistema de incendios de tuberías secas y 29 cámaras de videovigilancia permanente, conectadas al C5.
Además de que consta de un doble túnel que permite circular continuamente desde la bajada del puente de Universidad y viceversa, sobre los carriles centrales de Circuito Interior.
También permite a los automovilistas incorporarse de Insurgentes a Patriotismo; de Circuito Interior a Barranca del Muerto y tiene una salía hacia el Eje 8 Sur, todo sin pasar semáforos, lo que descongestiona de manera muy importante este cruce, explicó.
Paralelamente, se recuperó un espacio público de 21 mil metros cuadrados, consistentes en un parque lineal de 900 metros con 16 cruces seguros, que cuentan con 400 nuevas luminarias y se rehabilitaron 32 mil metros cuadrados de banquetas.
Tungüí Rodríguez explicó que el sistema de túneles cuenta con un cárcamo de bombeo que capta hasta 240 mil metros cúbicos de agua, para evitar inundaciones.
La nueva vialidad también fue equipada con un sistema de ventilación compuesto por 14 equipos de extracción de gases y humos generados por la combustión de los vehículos y para garantizar la seguridad, se colocó un sistema de plumas de control vial con el fin de regular el tránsito en caso de accidentes.
El secretario dejó claro que el uso de esta vialidad será completamente gratuito, y señaló que su construcción es ejemplo de la participación ciudadana en el desarrollo de la infraestructura de la Ciudad de México.
Ello debido a que se realizaron 150 reuniones y 45 recorridos con vecinos y especialistas para concretar 18 modificaciones que mejoraron el proyecto, aseguró al agradecer “la paciencia que tuvieron durante la ejecución de la obra; ahora les estamos entregando una vialidad eficiente y segura”.
El funcionario del gobierno capitalino aprovechó también para reconocer la labor de 700 trabajadores de empresas mexicanas que participaron.
“Tenemos un túnel sobre otro con excavaciones a casi 30 metros de profundidad y con desincorporaciones e incorporaciones. Es un distribuidor vial subterráneo”.
Con la nueva vía se reducirán los tiempos de cruce, a través de una obra de complejidad técnica, pues se extrajeron 300 mil metros cúbicos de material, se colocaron dos mil 400 pilas de concreto armado en muros y dos mil piezas prefabricadas de concretos en techos y pisos.
El Desnivel Mixcoac-Insurgentes es la última adecuación vial que forma parte del Programa de Rehabilitación y Mantenimiento Integral del Circuito Interior, a través del cual se garantiza el mantenimiento integral de los 42 kilómetros de la vialidad hasta el año 2025.