“Pronovias me permite crecer creativamente, y aportar un sentido de costura moderno y americano, además de poder acercar mis diseños a un público mucho más grande”, dice Wang sobre la colaboración en una conferencia virtual junto a la directora de la firma Pronovias, Amadine Ohayon.
Vera Wang, (nueva York, 1949) sostiene que no es “una diseñadora de vestidos de novia per se”, sino que “es algo que sucedió de forma natural”, pero lo cierto es que su nombre es uno de los más consolidados en la industria de vestidos nupciales, que ahora, junto al gigante Pronovias, puede “hacer costura y llegar a un público amplio tras muchos años de esfuerzo y trabajo”, resalta.
Estudió historia del arte y fue patinadora artística profesional, además de editora de la cabecera Vogue durante más de diez años. Después, se abrió camino en el mundo del diseño nupcial, y rostros como Mariah Carey, Uma Thurman, Sharon Stone o Victoria Beckham optaron por darse el “sí quiero” enfundadas en sus creaciones.
Figurín de nueva colección de Vera Wang y Pronovias. EFETras haber “explorado el mundo del diseño desde hace más de treinta años”, el motor de la creadora es “empoderar a cada mujer a ser quien es”, y tiene claro que sus novias son las protagonistas: “Mi labor es la de apoyar la creatividad de ellas y aconsejar, esa es la parte que me fascina de hacer vestidos de novia”, señala.
Novias “muy creativas, seguras de sí mismas y que amen la moda” es como la creadora define el perfil de sus clientas reales y también potenciales de esta nueva colaboración, en la que prioriza el perfil de las propias novias sobre las tendencias, de las que se desmarca.
Adelanta que la colección abrazará la diversidad de tallaje e indica que durante toda su carrera ha vestido "a muchas mujeres de distintos cuerpos y tallajes”, que oscilan entre bailarinas y “oficiales del ejército”, creando una diversidad entre sus clientas que califica como “un privilegio”.
En materiales que van desde mikados, “uno de los tejidos más bonitos y que puede dar volúmenes estructurales”, al uso de cuentas a modo de ornamentación; todo ello en una línea “minimal y arquitectónica” en la que las espaldas bajas y abiertas cobran relevancia como sello de identidad de la diseñadora.
También incide en que se trata de una “oportunidad de negocio”, consciente de que la moda que permite crear buenos productos necesita de “buenos materiales, infraestructura, procesos de manufacturación y músculo financiero”, cualidades que afirma haber encontrado en esta nueva alianza con uno de los gigantes del sector nupcial.
Una alianza que se materializa tras haber trabajado con la crisis sanitaria de por medio, un proceso tedioso que asegura haber capeado con habilidad junto a Pronovias: “Ha sido muy duro, nuestras oficinas llevaban tiempo sin estar cerradas y trabajar por Zoom entre Nueva York y Barcelona es difícil a nivel creativo, cuando cada minucioso detalle es relevante y exige precisión”, detalla.
“El estilo único de Vera y sus icónicos diseños, junto con nuestra gran capacidad para la obtención de materiales de alta calidad y nuestras habilidades técnicas, dan lugar a una colección única que nos enorgullece poder ofrecer a todas las novias amantes de la moda de todo el mundo», declara Amandine Ohayon, CEO de Pronovias sobre la colección.
El resultado, que verá la luz en octubre es para Wang una colección “extraordinaria”, que aúna “tecnología y procesos sublimes de manufacturación”, para así poder vestir a sus clientas, “creativas y valientes”, porque si algo tiene claro Wang, tras treinta años de andadura en el sector, es que “las novias más guapas son aquellas que se sienten más cómodas”.
Por María Muñoz