Madrid, 8 mar (EFE).- Los diseñadores tienden a simplificar el armario de la mujer, no cree en las temporadas, prefiere piezas femeninas y con carácter, de ahí que en el Día de la Mujer los vestidos y las piezas versátiles hayan sido el plato fuerte en las colecciones de la firma The Second Skin Co. y del diseñador Juanjo Oliva presentadas en Madrid.
Antonio Burillo y Juan Carlos Fernández, directores creativos de la firma The Second Skin Co. que triunfa en Hollywood, llevaron a Madrid es Moda una colección protagonizada por vestidos coloristas y con siluetas estructuradas.
Rosas, amarillos, blancos, verdes, marrones y tonos flúor tiñen prendas estructuradas, con un estudiado patronaje y amplios volúmenes, así como siluetas más fluidas.
El vestido vuelve a ser protagonista, seña de identidad de la firma, de la que han salido prendas para Jennifer Lopez, Hailee Steinfeld, Petra Nemcova, Zendaya o Jessica Biel, creaciones que hablan de romanticismo.
En este Día de la Mujer, Juanjo Oliva quiso rendir homenaje a las mujeres con una colección de vestidos, esbeltos y elegantes, en la que no faltó un diseño morado, el color que representa el movimiento feminista y que se remonta a los inicios del mismo, concretamente a 1908, momento en el que las sufragistas inglesas eligieron el morado -junto al blanco y verde- como símbolo reivindicativo de su lucha.
También se asocia al incendio que se produjo en 1911 en la fábrica textil Triangle Shirtwaist en el que 146 trabajadoras murieron a causa de las quemaduras y el humo, que era morado debido al color de las telas con las que estaban haciendo camisas.
El morado brilló en la colección de Oliva, que reivindica un vestir femenino y práctico, sin ataduras, "lo importante es que la mujer se sienta cómoda", dice a Efe el diseñador.
"Los vestidos son mi fuerte", añade Juanjo Oliva, que ha confeccionado su primera colección para "See Iou", una firma que apuesta por el diseño de autor a precios asequibles.
En sus propuestas, que otorga gran parte del protagonismo a los tejidos, se aventura en crear una noche más relajada y joven, sin opulencias. "Cuando la gente quiere vestirse de noche, muchas se disfrazan y eso es un error".
Oliva cree que existe un vacío en el vestir de fiesta y se lanza a crear piezas elegantes, sencillas y femeninas, muy favorecedoras. "Me gusta pensar que lo que hago es real, muchas mujeres se sienten bien con los vestidos que denomino 'dianoche'".
Considera que hay demasiada oferta y tiende a simplificar las colecciones, al mismo tiempo que abraza la moda lenta, el "upcycling" y reutiliza tejidos para alumbrar nuevas piezas. "Calidad mejor que cantidad", recuerda Oliva, quien en este trabajo aboga por el disfrute de la vida y la celebración.
Así, se vieron diseños frescos y femeninos que buscan formar parte de los momentos especiales. "Son unidades limitadas", dice Oliva que ahora vive entre Madrid y París y que el viernes presentará otra colección, "más formal, con mucho color y mucha energía".
También la firma Alvarno quiso celebrar el Día de la Mujer presentando el vestuario del espectáculo "Woman", que se estrena en Madrid.
"La danza es movimiento, libertad y la máxima expresión de la belleza", según los diseñadores Arnaud Maillard y Álvaro Castejón, dúo creativo de la firma Alvarno.
"Fluidez y firmeza, esperanza y desolación, delicadeza y fortaleza, sentimientos encontrados que muestran las múltiples facetas en la vida de una mujer luchadora, sensible y pasional", dice Maillard, que trabajó junto a Karl Lagerfeld.
Todo el vestuario gira alrededor de las emociones y los movimientos interpretados con volúmenes exagerados y vaporosos, batas de cola en degradé, corazas desestructuradas y torbellinos de flecos.