Querétaro, 1 Septiembre 2021.- Las unidades de atención pediátrica de la Secretaría de Salud del Estado de Querétaro (SESEQ) ya se encuentran preparadas para brindar especial atención por el regreso a clases presenciales en menores de edad, aseguró el responsable del reglamento santuario de la Unidad de Servicios de Salud, José Hernández Puga.
El funcionario preciso que ya existe un protocolo de coordinación junto con las autoridades educativas y planteles reabiertos para atender un caso positivo, así como para dar seguimiento a los contactos cercanos del menor que haya tenido durante las 2 semanas previas a qué se confirmara su positivo.
"Ya se tiene un canal específico para la comunicación tanto de los casos sospechosos como de la atención en torno alas medidas preventivas en esa institución educativa, así como el seguimiento de los contactos que hayan sido efectivos durante el periodo de incubación que son por lo menos 14 días", aclaró.
Por otra parte, recalcó que la SESEQ ya cuenta con personal preparado para brindar atención a pacientes menores de edad dentro de los hospitales de esta dependencia, sin descuidar la atención al resto de pacientes que puedan tener más edad e incluso edades de riesgo como son los adultos mayores de 60 años.
En cuanto al tratamiento, Hernández Puga precisó que esté se dará de acuerdo a las necesidades que tenga el paciente, recordando que el COVID-19 llega a tener síntomas distintos en menores de edad, dónde incluso un alto porcentaje llega a considerarse como asintomático o con malestares leves y de baja duración.
"Específicamente contamos con una unidad de atención pediátrica... el tratamiento va enfocado sobretodo a la sintomatología que el paciente presente en ese momento, nuestras unidades tienen la capacidad terapéutica y diagnóstica para identificar las necesidades de esas personas y en ese momento atenderlas", acotó.
No obstante, se tiene considerada la presencia de afectaciones más graves como los problemas circulatorios y de presión que suelen presentarse posteriores a la presencia del virus, así como afectaciones a las vías respiratorias, dolor articular, fiebre o febricula que también son posibles de ver en niños, niñas y adolescentes.
Hasta el momento, al menos 8 personas menores de edad habrían fallecido como causa directa de COVID-19, además de que se han presentado al menos 400 contagios dentro de un rango de los 0 a 17 años en lo que va de la pandemia, considerando que fue el sector con menor movilidad por el confinamiento.
El funcionario preciso que ya existe un protocolo de coordinación junto con las autoridades educativas y planteles reabiertos para atender un caso positivo, así como para dar seguimiento a los contactos cercanos del menor que haya tenido durante las 2 semanas previas a qué se confirmara su positivo.
"Ya se tiene un canal específico para la comunicación tanto de los casos sospechosos como de la atención en torno alas medidas preventivas en esa institución educativa, así como el seguimiento de los contactos que hayan sido efectivos durante el periodo de incubación que son por lo menos 14 días", aclaró.
Por otra parte, recalcó que la SESEQ ya cuenta con personal preparado para brindar atención a pacientes menores de edad dentro de los hospitales de esta dependencia, sin descuidar la atención al resto de pacientes que puedan tener más edad e incluso edades de riesgo como son los adultos mayores de 60 años.
En cuanto al tratamiento, Hernández Puga precisó que esté se dará de acuerdo a las necesidades que tenga el paciente, recordando que el COVID-19 llega a tener síntomas distintos en menores de edad, dónde incluso un alto porcentaje llega a considerarse como asintomático o con malestares leves y de baja duración.
"Específicamente contamos con una unidad de atención pediátrica... el tratamiento va enfocado sobretodo a la sintomatología que el paciente presente en ese momento, nuestras unidades tienen la capacidad terapéutica y diagnóstica para identificar las necesidades de esas personas y en ese momento atenderlas", acotó.
No obstante, se tiene considerada la presencia de afectaciones más graves como los problemas circulatorios y de presión que suelen presentarse posteriores a la presencia del virus, así como afectaciones a las vías respiratorias, dolor articular, fiebre o febricula que también son posibles de ver en niños, niñas y adolescentes.
Hasta el momento, al menos 8 personas menores de edad habrían fallecido como causa directa de COVID-19, además de que se han presentado al menos 400 contagios dentro de un rango de los 0 a 17 años en lo que va de la pandemia, considerando que fue el sector con menor movilidad por el confinamiento.