Esto, puntualizó el líder empresarial, hará que el sector de la construcción encuentre un punto de normalidad hasta dentro de dos o tres meses, mientras que el abastecimiento de insumos podría estabilizarse en uno o dos meses.
Asimismo, refirió que otro factor que alargará el regreso a la normalidad de la industria es el marco de protocolos para la prevención del contagio del COVID-19.
“Es gradual, porque así lo pide la autoridad, nuestro sector depende de mucha producción dentro de la cadena, por los insumos y materiales, y pararon también. Ese tipo de productividad también inicia el día de hoy, y de aquí a lo que produce, lo distribuye, lo organiza y lo vende va a llevar tiempo”, explicó.
De esta manera, indicó Ugalde Ríos, actualmente solo han aperturado algunas empresas que dejaron obras detenidas, y se ampliará el trabajo en obra pública.
Recordó que el 95 por ciento de las empresas agremiadas a la CMIC detuvieron totalmente sus actividades.
El Líder de CMIC añadió que la gradualidad de la reactivación de las construcciones dependerá de los concursos de licitación que el sector público genere en los próximos días, para proyectos nuevos.
“Las obras que pueden iniciar son las que se suspendieron por causa de la pandemia, porque como nuestro sector venía adoleciendo falta de volumen de trabajo, no eran tantas”, lamentó.
Detalló que dentro de los protocolos para reactivar operaciones comienza desde el registro en el Instituto Mexicano del Seguro Social, y la revisión de las medidas de sana distancia y prevención del contagio, en obras públicas.
En el caso de la obra privada, resaltó que serán revisadas por los inspectores en la materia en cada municipio o estado.
Por último, puntualizó que se han capacitado a 300 personas en materia de protocolos de seguridad sanitaria, y que continuarán con los cursos en el mes de junio.