La Encuesta Nacional sobre Satisfacción Subjetiva con la Vida y la Sociedad (UNAM, 2015) apunta que en México, en una escala del uno al 10, en general el 8.53 está satisfecho con su vida.
Según los expertos, la felicidad es una cuestión individual. Las mediciones señalan que hay países más felices que otros, y esto lo relacionan con el bienestar de la sociedad, es decir, una población que tiene alimentación, agua, transporte y educación, se interpreta que es feliz.Pero qué hace diferente a los mexicanos. Según el estudio de la UNAM, la vida familiar ocupa el promedio más alto de satisfacción. Así es, los mexicanos a pesar de padecer aún la falta de servicios básicos, basamos nuestra felicidad en la relación con la familia y lo que nos hace sentir bien desde lo emocional.
Y déjenme contarles que los MEXICANOS somo muy sabios en ese sentido, pues la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) declaró que cada 20 de marzo desde 2013 se celebraría el Día Internacional de la Felicidad, basando su propuesta en una iniciativa del Reino de Bután, que mide la Felicidad Nacional Bruta, e incluso la considera más importante que el Producto Interno Bruto, resaltando que la felicidad debe ser una de las aspiraciones universales de los seres humanos y en los gobiernos debería incluirse dentro de las políticas públicas.
El tema ha sido tan relevante para el progreso y bienestar del ser humano y sus poblaciones, que ha llevado a la Universidad de Harvard a realizar una investigación, misma que concuerda con la forma en que los MEXICANOS apreciamos la felicidad, ya que dichos resultados arrojan un interés más individual y de bienestar emocional con lo que se rodea, que con cosas materiales.Harvard señala que el secreto parece estar en aceptar la vida tal y como es, señalando seis consejos principales para sentirse feliz.
Perdone sus fracasos
Aceptar las emociones negativas, permite disfrutar de la positividad y la alegría.
Agradecer
Agradece por las cosas grandes y pequeñas.
Haga deporte
Basta con practicar un ejercicio suave como caminar a paso rápido durante 30 minutos al día para que el cerebro secrete endorfinas, esas sustancias que nos hacen sentir drogados de felicidad.
Simplifique
Identifique qué es lo verdaderamente importante, y concéntrese en ello.
Meditación
Este sencillo hábito combate el estrés. Se convierte en un momento idóneo para manejar nuestros pensamientos hacia el lado positivo, aunque no hay consenso en que el optimismo llegue a garantizar el éxito, sí le aportará un grato momento de paz.
Resiliencia
La felicidad depende de nuestro estado mental, no de la cuenta corriente. Concretamente, nuestro nivel de dicha lo determinará aquello en lo que nos fijemos y en las atribuciones del éxito o el fracaso.
Así que ya lo sabe querido lector, los MEXICANOS tenemos un punto más para sentirnos orgullosos de quienes somos, hasta harvard coincide con la forma en que en nuestro país amamos la vida y la importancia que le damos a lo que nos hace bien y nos da felicidad.