Raúl Chávez Nieto, presidente de la Comisión de Juventud en la LIX Legislatura local aseguró que tres de cada 10 jóvenes queretanos presentan dificultad para encontrar trabajo cuando tienen tatuajes o modificaciones corporales.
Inclusive recordó que el año pasado, al menos 120 personas se acercaron a diversas organizaciones, entre ellas SOS Discriminación, en la que denunciaron haber sido discriminados al momento de acceder a un trabajo.
“En México una de cada cinco personas sufre discriminación y en Querétaro, el 56.6 por ciento de la población mayor a 18 años ha manifestado que ha sido discriminada y gran parte de ellos, dice que es por su apariencia física y mientras que 26.9 por ciento de los afectados fueron discriminados por su edad”.
Explicó el 19.4 de la población de la entidad, ha sido discriminado por este tipo de situaciones y de ellos el 32.7 perciben algún tipo de dificultad para acceder a un trabajo.
En Querétaro, detalló, hay datos que revelan que gran parte de los jóvenes discriminados son en el ámbito laboral, pues en las empresas, especifican quienes solicitan el empleo, piden que no tengan tatuajes o modificaciones corporales.
“Tener tatuajes, modificaciones corporales o apariencia física no debería y no tendría que ser impedimento para que un joven tenga posibilidad de adquirir un trabajo porque esto no es una limitante para desempeñarse profesionalmente y, además, se debe garantizar el libre desarrollo de la personalidad del individuo”.
Explicó que la reforma contempla tres puntos, el primero es prevenir y eliminar discriminación a toda persona, principalmente a los jóvenes por apariencia física, tatuajes o modificaciones corporales.
La segunda, manifestó, es asegurar que los jóvenes tengan garantizado el derecho al libre desarrollo de su personalidad y que se incluya en la ley que las modificaciones corporaciones, apariencia física y tatuajes no sean motivo para acceder a un trabajo.
Chávez Nieto aclaró que actualmente no se sanciona a quien discrimina por estos motivos por lo que primero busca incluir en la ley estas características para que posteriormente los afectados puedan quejarse ante los organismos de Derechos Humanos.
“Una vez contempladas estas características en la ley, los jóvenes pueden denunciar ante las instancias correspondientes”.
Con estas modificaciones a la ley, detalló, se sientan las bases para que cualquier persona que sea afectada pueda presentar una denuncia en contra del particular que se negó a emplearlo por tener alguna de las características señaladas.
“Confiamos en que se pueda concretar esta reforma, pues es nuestro deber y obligación como diputados que cada una de las iniciativas sean revisadas, estudiadas y aprobadas, porque son un clamor de la población”.
El legislador manifestó que los centros donde los jóvenes se realizan tatuajes debe estar regulados para garantizar que la salud de las personas.