Señaló que la realidad que vive en materia de seguridad para las mujeres, agravia la memoria histórica de México, que se ha caracterizado por ser un país de trabajo con gente buena.
"La realidad que estamos viviendo, sin culpar a nadie es y urge convocar al diálogo nacional, yo espero que el presidente de la república sea el primero que genere las condiciones de diálogo", expresó.
Exhortó a todos los que conforman las autoridades municipales, estatales y federales a hacer un alto y acabar con el discurso de polarización y verdaderamente asumir el papel que les toca para evitar que se sigan dando casos como el de Fátima y miles de mujeres más.
"Esta polarización no beneficia a nadie, este discurso mañanero en el cual unos son culpables, otros son inocentes y decirlo con toda caridad estamos en contra absolutamente en contra de este perdón que se ha planteado a los criminales desde el gobierno federal desde la campaña", manifestó.
Y es que dijo, en países centroamericanos donde se aprobó una Ley de Amnistía, se comprobó que lejos de ayudar, lo que generó fue el aumento casi al triple en los índices de violencia, de ahí que reiteró la importancia de cambiar los actuales discursos de polarización por acciones de unidad.
"Que cambiemos el discurso de abrazos y no balazos y que hagamos que las instituciones funcionen bien para evitar más casos como el de Fátima", añadió.
De ahí que indicó, en el ámbito local la administración trabaja en coordinación con diversas instituciones como la procuraduría de la defensa del menor y el adolescente, así como el Instituto Municipal de la Mujer, afín de proteger a los más vulnerables.
"El Instituto de la Mujer tiene facultades para trabajar con la policía y Fiscalía para poder proteger a las mujeres que hagan denuncias y que no se quede en un llamado en vano, en un grito, un abismo de las mujeres", concluyó.