A pesar de que se han ingresado dos solicitudes a través de Oficialía de Partes, exigiendo la intervención del gobierno local para que elimine dichos focos de infección, a la fecha no han recibido respuesta.
David Olmos Juárez, administrador y representante legal de los fraccionamientos antes mencionados, detalló que además de tirar ramas de árboles, algunos trabajadores abren fosas en la tierra en donde confinan viseras de animales que sacan del rastro municipal, así como restos de perros que son sacrificados en control animal.
Advirtió que ya se dio parte a la Secretaría de Salud Estatal y a Regulación Sanitaria para que apliquen las sanciones correspondientes, toda vez que los malos olores, así como el humo son constantes durante todas las noches y esto ha generado enfermedades respiratorias entre la población.
Cabe recordar que hace 5 meses la Comisión Federal para la Prevención de Riesgos Sanitarios (Cofepris) intervino para clausurar el rastro de San Juan del Río, luego de que se encontró que había prácticas ilegales.
A pesar de dicha medida, las autoridades municipales, representadas por Manuel Álvarez Camacho, siguen permitiendo actividades ilícitas.
Originalmente la dependencia tenía un programa para convertir los residuos orgánicos en composta, en tanto que el relleno sanitario contaba con un incinerador; sin embargo, a decir de los vecinos, los sistemas no han estado aprovechándose.
“Justo en la parte trasera del antiguo relleno sanitario, iban a tirar los perros que sacrificaban, les ponían una serie de productos para convertir toda esa materia en composta, pero no hemos visto que vehículos ingresen a dicha zona, tampoco hemos visto que el incinerador del rastro municipal funcione, suponemos que por ello vienen aquí a tirar todos los desperdicios”, finalizó.
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