Y es que con la llegada de la pandemia al estado, la reconversión hospitalaria, y la prioridad por atender a los contagiados por coronavirus,ha dejado en segundo termino la atención de pacientes que acuden a sus unidades familiares para solicitar atención referente a otros padecimientos.
Pese a que la clínica referida, no tiene la capacidad y no está destinada para atender a pacientes infectados por el virus tipo “SARS-CoV-2”, muchas de las personas que sospechan haber adquirido la enfermedad, acuden al lugar en espera de ser atendidos.
Sin embargo, aunque el servicio no les es negado, en el cien por ciento de los casos, que cumplen con los síntomas relacionados a la enfermedad, son canalizados a las instalaciones del Hospital General en Querétaro, o son puestos a disposición de la secretaría de salud para que determinen el tratamiento a seguir.
Dicha situación ocasiona que el personal médico, enfermeras e incluso trabajadores administrativos, justificando su atención ante la contingencia sanitaria, descuiden y retrasen los servicios que el resto de pacientes requieren del lugar.
De acuerdo con información de los familiares que esperan al exterior de las instalaciones, refieren que sus enfermos no han podido recibir la atención que realmente requieren al posponer cirugías, o señalar que el personal no está laborando de forma completa, lo que retrasa la ejecución de estudios clínicos o generación de citas especializadas.
Además, de que si a juicio de los prestadores de servicio médico, consideran que los distintos padecimientos pueden esperar por no ser considerados en calidad de “necesarios”, entonces se da prioridad a la atención de casos con afectaciones urgentes y vitales.
Por otro lado, los pacientes que entran y salen de las instalaciones, en un gran porcentaje,aseguran únicamente acudir a citas programadas de seguimiento, solicitud de incapacidades o recoger medicamento referente a su tratamiento.
Y aunque no manifiestan el mismo nivel de descontento, que los familiares previamente mencionados, aseguran que “si de por si, el servicio nunca ha sido el mejor, ahora con la llegada del “Covid-19”y la implementación de sus protocolos de seguridad, menos”, al incrementar su tiempo de espera para ser atendidos.