Londres, 18 Sep (Notimex).- Un nuevo informe sobre la dramática situación que atraviesa Siria reveló que tres millones de niños dejaron de asistir a la escuela, mientras los menores que están como refugiados en otros países tienen dificultades para matricularse.
La agencia humanitaria Save the Children sostuvo que a casi tres millones de menores sirios se les está negando una educación cuando los centros escolares son blancos constantes de ataques.
Añadió que, desde el inicio de la guerra civil hace más de tres años, Siria ha pasado de tener una de las mejores tasas de asistencia escolar a un país con el segundo peor registro del mundo.
El informe publicado este jueves en Londres subrayó cómo el conflicto de Siria, que ahora entra en su cuarto año, está negando una educación decente a una generación de niños, con consecuencias que pueden durar por generaciones.
En Siria, el informe estimó que tres mil 465 escuelas, o una quinta parte de los edificios educativos del país, fueron destruidos o dañados, o se están usando con fines militares.
El trauma y los trastornos psicológicos graves en los niños a consecuencia de la guerra también van en aumento, lo que afecta su capacidad para aprender.
"Es absolutamente vergonzoso que la obligación de proteger a las escuelas no se está respetando en este conflicto, poniendo en peligro las vidas de niños y maestros y obligando a millones a dejar la educación", dijo el director de Save the Children Regional Roger Hearn.
Los niños refugiados sirios en los países vecinos se enfrentan a tasas alarmantes de abuso, intimidación, castigo corporal y la marginación, según el reporte.
La agencia humanitaria Save the Children sostuvo que a casi tres millones de menores sirios se les está negando una educación cuando los centros escolares son blancos constantes de ataques.
Añadió que, desde el inicio de la guerra civil hace más de tres años, Siria ha pasado de tener una de las mejores tasas de asistencia escolar a un país con el segundo peor registro del mundo.
El informe publicado este jueves en Londres subrayó cómo el conflicto de Siria, que ahora entra en su cuarto año, está negando una educación decente a una generación de niños, con consecuencias que pueden durar por generaciones.
En Siria, el informe estimó que tres mil 465 escuelas, o una quinta parte de los edificios educativos del país, fueron destruidos o dañados, o se están usando con fines militares.
El trauma y los trastornos psicológicos graves en los niños a consecuencia de la guerra también van en aumento, lo que afecta su capacidad para aprender.
"Es absolutamente vergonzoso que la obligación de proteger a las escuelas no se está respetando en este conflicto, poniendo en peligro las vidas de niños y maestros y obligando a millones a dejar la educación", dijo el director de Save the Children Regional Roger Hearn.
Los niños refugiados sirios en los países vecinos se enfrentan a tasas alarmantes de abuso, intimidación, castigo corporal y la marginación, según el reporte.