El Servicio Meteorológico Nacional (NWS) de Estados Unidos reportó este lunes que la tormenta empezó a abandonar regiones del sureste y de la costa atlántica meridional después de haber generado más de medio metro de nieve en Carolina del Norte y Virginia del Oeste.
Sin embargo, el NWS pidió a la población conducir con cautela toda vez que hizo notar que algunas zonas de los estados costeros podrían todavía resentir precipitaciones de hielo, nieve o lluvia congelada debido a un nuevo frente frio que cruza la región.
“Las condiciones de viaje continúan siendo peligrosas para muchas de estas áreas afectadas y son posibles interrupciones de electricidad adicionales”, advirtió.
Para la zona del Pacífico estadunidenses, el NWS indicó que otro frente frio está acercándose a la costa y tiene el potenciar del producir acumulaciones de nieve desde la Sierra Nevada hasta las montanas Rocallosas.
Al mismo tiempo, una segunda tormenta podría generar condiciones invernales desde el estado de Washington hasta Idaho.