La Habana, julio (SEMlac).- Para Marta María Hernández, la novedad de mezclar las dos primeras cucharadas del almuerzo de su bebita, cada mediodía, con los "polvitos de donación" se convirtió rápidamente en hábito.
"Se disuelven muy bien, no cambian el sabor ni el olor de la comida y no tienen ningún efecto secundario", explica a SEMlac esta joven madre del municipio cabecera de la provincia de Pinar del Río, a unos 200 kilómetros de la capital del país.
Antes de este suplemento, la pequeña Adhara había estado consumiendo Poly-Vi-Sol, por indicación de la pediatra, pues a los seis meses fue diagnosticada con una anemia ligera, "pero no se lo tomaba bien y le provocaba algún estreñimiento", contó Hernández, quien está muy satisfecha con el nuevo producto.
Garantizar una correcta nutrición y prevenir la anemia, en particular durante los primeros 1.000 días de vida, se cuenta entre los propósitos de los Polvos de Múltiples Nutrientes que el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) ha entregado a varias provincias cubanas.
Aunque se distribuyen para todo el país, al territorio más occidental del archipiélago llegaron como parte del apoyo que la agencia de las Naciones Unidas instrumentó luego del huracán Ian, de categoría cuatro, que devastó el occidente de Cuba a finales de septiembre de 2022.
"Ian tuvo un impacto enorme, arrasó con muchos cultivos y con nuestros grandes almacenes de alimentos. Nos quedamos prácticamente sin alimentación de un día para otro", rememoró con SEMlac Dámaso Díaz Mato, jefe del Departamento de Inocuidad de los Alimentos, del Centro Provincial de Higiene, Epidemiología y Microbiología de la occidental provincia.
"Los polvos llegaron en un momento coyuntural, a punto de partida del impacto combinado del huracán y de la situación económica. En este momento de déficit alimentario, muchas madres han visto ese aporte como algo muy positivo, pues el alcance a la alimentación óptima se les complica", agregó.
Mas de 3.000 niñas y niños de entre 12 y 23 meses, de siete de los 11 municipios de Pinar del Río, han recibido el soporte nutricional. En el caso de los otros cuatro municipios (Guane, Sandino, Mantua y Minas de Matahambre), se complementan con productos similares suministrados por el Programa Mundial de Alimentos (PMA).
El suplemento se incorpora en los hogares cubanos en dos ciclos de tratamiento: el primero por 60 días, a razón de un sobre diario; y luego se repite a los cuatro meses, con el mismo esquema.
Estudios de Unicef han corroborado que las prácticas óptimas de alimentación para lactantes, niñas y niños pequeños pueden mejorar los índices de supervivencia y promover un crecimiento y desarrollo saludables, especialmente durante el período del nacimiento a los dos años.
En particular, los Polvos de Múltiples Nutrientes son una mezcla de 15 vitaminas y minerales, que incluyen hierro, vitamina A, vitamina C, zinc, ácido fólico y otros muy necesarios para un crecimiento y desarrollo adecuados.
Desafíos más allá de los ciclones
En Cuba, la deficiencia de hierro ha constituido la carencia específica de micronutrientes más extendida y la principal causa de anemia en lactantes, niñas y niños hasta cinco años, pero en especial en los menores de 24 meses.
Así lo documentaban en 2011 Gisela Pita y Santa Jiménez, investigadoras del Instituto de Nutrición e Higiene de los Alimentos, en el artículo "La anemia por deficiencia de hierro en la población infantil de Cuba. Brechas por cerrar", publicado por la Revista Cubana de Hematología, Inmunología y Hemoterapia.
Según las autoras, un factor protector para esta enfermedad en los lactantes y menores de dos años es "la ingestión exclusiva de leche materna durante los primeros seis meses de vida y su prolongación complementaria con los alimentos que contengan hierro de buena disponibilidad hasta más adelante".
Amamantar les protege de las infecciones, proporciona una fuente ideal de nutrientes y es una práctica económica y segura, aseveran las estudiosas en su texto.
Sin embargo, solo 41 por ciento de los niños y las niñas en Cuba reciben lactancia exclusiva en su primer medio año de vida, según la Encuesta de Indicadores Múltiples por Conglomerados (MICS, por sus siglas en inglés), cuya última ronda tuvo lugar en 2019, realizada por el Ministerio de Salud Pública (Minsap) con asistencia técnica y financiera de Unicef.
Una educación nutricional insuficiente y patrones alimentarios poco saludables, como el bajo consumo de hortalizas y vegetales y una alta ingesta de azúcares y grasas, también tienen un impacto desfavorable en el estado nutricional de la población, en particular de la infantil.
Además, las interrupciones en la cadena de suministro de alimentos, como consecuencia de la pandemia de covid-19, ocasionaron un fuerte impacto agregado en la salud y la nutrición, explican las investigadoras Blanca Terry, Denise Silvera y Yarisa Domínguez en el trabajo "Fortificación domiciliaria con polvos de micronutrientes. Lineamientos técnicos para el personal de salud", publicado en la Revista Cubana de Higiene y Epidemiología.
"El país enfrenta en la actualidad su desafío más poderoso, debido a que dentro de una sindemia singular y única se integraron el cambio climático, la vulnerabilidad alimentaria y nutricional, la doble carga de la morbilidad nutricional (sobrepeso, obesidad y deficiencias de micronutrientes), el alza de las enfermedades crónicas no transmisibles, y la pandemia por la covid-19", advierten las autoras.
"Todo esto influye en el deterioro del estado nutricional de los individuos, cuyo sistema inmune requiere de múltiples micronutrientes, que desempeñan funciones vitales", agregan las profesionales del Instituto Nacional de Higiene, Epidemiología y Microbiología y del Centro de Nutrición e Higiene de los Alimentos.
Además, a juicio de Díaz, independientemente de esta situación, "a partir del primer año de vida se incrementa la demanda nutricional, pues el niño comienza a comer más, a crecer un poquito más rápido, a caminar y desarrollar otras actividades físicas que no tiene cuando está pequeño, lo que implica otras necesidades" que, por ejemplo, los polvos ayudan a completar.
Para Pinar el Río, la segunda parte del esquema con los Polvos de Múltiples Nutrientes comenzaría el próximo septiembre y se realizara una evaluación de su impacto, explicó el funcionario Díaz Matos.
"A estas edades los niños tienen un seguimiento pediátrico. A los seis meses se les realiza un análisis de hemoglobina y al año, otro. Entonces, esos resultados los vamos a tomar como referencia para esa evaluación", dijo.
En opinión de Díaz Matos, no ha sido complicado garantizar el correcto uso del suplemento nutricional por parte de las familias beneficiadas, pues "la madre cubana siempre ha estado adaptada a darles vitaminas a los niños, a partir de que ya la lactancia materna exclusiva se detiene", afirma.
"Los polvos son muy beneficiosos, gratuitos y llegan en un momento muy necesario", agrega.