Fue en septiembre de 2019 cuando la nación europea creó dicha estrategia global para salvaguardar los mares y las especies de la contaminación plástica, el incremento de las temperaturas y el impactos de la actividad humana.
Ante la preocupación de que diversas especies marinas se encuentran en peligro de extinción, desde hace algunos meses apoyan esta estrategia: Belice, Costa Rica, Finlandia, Gabón, Kenia, Seychelles, Vanuatu, Portugal, Palaos y Bélgica.
La coalición internacional que encabeza Reino Unido tiene como finalidad abordar los impactos y salvaguardar al menos el 30 por ciento del océano mundial en las áreas marinas protegidas para 2030.
Cabe destacar que algunos peligros que están amenazando la vida marina y los hábitats son: el aumento de la temperatura del mar, la desoxigenación, la acidificación, la pérdida de hábitat, la sobrepesca y la contaminación.
El nuevo miembro de la Alianza fue recibido hoy oficialmente por el ministro de Medio Ambiente Internacional, Zac Goldsmith, durante un discurso inaugural en la conferencia llamada “Blue Road to Glasgow” del Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF, por sus siglas en inglés).
“Estoy agradecido con WWF por organizar esta importante discusión a medida que avanzamos en la acción oceánica antes de la COP26. Estamos en camino de tener más de la mitad de las aguas del Reino Unido protegidas para 2020. Es correcto que sigamos liderando este tema”, dijo.
Añadió que Suecia es el último país en unirse a la iniciativa de protección de los océanos, y espera que otros se unan y ayuden a proteger al menos el 30 por ciento de los mares en los próximos 10 años.
El gobierno británico destacó que invitará a todas las naciones a inscribirse en esta coalición para que se acuerde un objetivo de protección marina, como parte de un nuevo Marco Global de Biodiversidad en la Conferencia de las Partes del Convenio sobre la Diversidad Biológica, en octubre de 2020.