“Los parámetros de vuelo del objetivo balístico corresponden a las características técnicas y tácticas de un misil balístico de alcance medio", informó el Ministerio de Defensa de Rusia en un comunicado difundido por la agencia rusa de noticias Sputnik.
Explicó que el sistema ruso de alerta sobre ataque de misiles detectó y siguió el lanzamiento del misil balístico norcoreano, el cual alcanzó una altura de 535 kilómetros y recorrió unos 510 kilómetros antes de caer en el mar de Japón.
Estados Unidos también afirmó que se trató de un misil de alcance "medio", sin embargo Corea del Norte aseguró haber probado con éxito su primer misil balístico intercontinental (ICBM, por sus siglas en inglés), el cual podría alcanzar “cualquier parte del mundo”.
"Precisó que se trató del Hwasong-14, que alcanzó una altitud de dos mil 802 kilómetros y sobrevoló una distancia de 933 kilómetros antes de alcanzar un blanco en el mar del Este".
Los gobiernos de Japón, Corea del Sur y Estados Unidos condenaron el ensayo y advirtieron que se trata de una violación de las resoluciones del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas.
Por su parte, China pidió "contención" a todas las partes y esfuerzos para superar de forma pacífica las tensiones sobre Corea del Norte, mientras Rusia, mediante su cancillería, expresó su preocupación por el nuevo lanzamiento del misil, ya que ello viola las resoluciones del Consejo de Seguridad.
El vicecanciller ruso, Serguei Riabkov, subrayó la necesidad de estabilizar la situación en torno a Corea del Norte, ya que sería la "única alternativa" para lograr el diálogo, de lo contrario una escalada de tensión amenazaría con consecuencias catastróficas.
Con la prueba de este martes se eleva a 10 el número total de los ensayos de misiles balísticos que Corea del Norte ha realizado en lo que va de año, incluyendo dos lanzamientos fallidos en abril pasado. En 2016, Pyongyang llevó a cabo más de 20 ensayos similares, además de la cuarta y la quinta pruebas nucleares.
Corea del Norte, que se proclamó potencia nuclear en 2005, argumenta que la presencia de miles de soldados estadunidenses en Corea del Sur y la política “hostil” de Washington, justifica su búsqueda de armas nucleares y misiles de largo alcance.