Río de Janeiro expandirá polémico programa para pacificar favelas

31 de Octubre de 2014
Río de Janeiro, 31 Oct (Notimex).- Río de Janeiro expandirá su política de “ocupación” de favelas por medio de la policía militar, una medida que inició en 2008 y que generó una gran controversia por los efectos colaterales vinculados a los excesos policiales.

La reelección del gobernador Luiz Fernando Pezão en los comicios del domingo pasado supone la permanencia en el cargo del secretario de Seguridad, José Mariano Beltrame, considerado uno de los hombres más influyentes en la reducción del crimen en la ciudad en las últimas décadas.

Beltrame, de 57 años, podría incluso reforzar su influencia en la política de seguridad de Río de Janeiro y expandir a las zonas norte y noreste de la ciudad la presencia permanente de la policía militar, según fuentes gubernamentales citadas este viernes por la prensa local.

Según analistas, sería una decisión de gran importancia, ya que Río de Janeiro enfrenta un período clave porque en agosto de 2016 la ciudad celebrará los Juegos Olímpicos.

El secretario de seguridad fue quien implementó la política de “ocupación” de las favelas por medio de unidades de policía militar entrenadas para el diálogo con los moradores de las favelas y la reducción del tráfico de drogas y armas.

Sin embargo, los residentes de las favelas denuncian un aumento de los abusos por parte de los oficiales, incluso torturas y asesinatos indiscriminados por parte de las fuerzas del orden.

Todo ello provocó que, pese a un gran éxito en la reducción de la violencia, el despliegue de las Unidades de Policía Pacificadora (UPP) fuera en los últimos meses muy controvertido y discutido por la sociedad civil, la prensa y la oposición política.

Desplegada en 38 favelas de Río de Janeiro desde diciembre de 2008, la presencia de las UPP provocó una baja en los índices de criminalidad en la ciudad, como reflejó en su reciente informe “Estudio Mundial sobre el Homicidio 2013” la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC).

Según la UNODC, el descenso de los homicidios entre 2007 y 2011 fue de 29 por ciento en la ex capital brasileña como consecuencia del despliegue permanente de policía militar en las favelas.

Sin embargo, esos datos comenzaron a ser revertidos: los homicidios aumentaron 21.9 por ciento en el primer trimestre de 2014 respecto al mismo período de 2013.

Además el robo a transeúnte aumentó 46.5 por ciento y el robo de vehículos 50.7 por ciento, según datos del Instituto de Seguridad Pública (ISP).

Etiquetas: