Miami, 16 ago (EFE).- Un oficial de la Policía del condado de Miami-Dade, en el sur de Florida, se mantiene este martes en estado de gravedad tras ser herido de bala en la cabeza por un sospechoso de robo a mano armada, el cual murió abatido por los oficiales.
El agente, cuya identidad así como la del asaltante no han sido reveladas, está ingresado en un hospital local al que fue transportado la noche del lunes, poco después de ocurrido el suceso en el noroeste de Miami.
De acuerdo con medios locales, la Policía de este condado recibió un aviso el lunes sobre un sospechoso de robo a mano armada en el vecino condado de Broward que había logrado huir.
El vehículo en el que el sospechoso se movilizaba fue divisado la noche de ese día y rodeado por patrulleros de la Policía de Miami-Dade, pero el conductor empotró su automóvil contra los policías y logró abrirse camino para huir.
Lo anterior dio pie a una persecución que concluyó cuando el vehículo del sospechoso chocó contra un carro —con tres personas en su interior, las cuales resultaron heridas, pero se encuentran en condición estable— y luego contra un poste de alumbrado eléctrico.
El sospechoso bajó del vehículo y huyó, lo que dio pie a una balacera en la que el agente resultó herido en la cabeza y posteriormente el individuo murió por los disparos de los agentes.
De acuerdo con el diario local Miami Herald, el agente herido tiene unos 30 años y se mantiene con vida gracias a que está intubado en el Hospital Jackson Memorial, en cuya fachada muchos agentes se han congregado para orar por la recuperación del oficial.
En una breve comparecencia con la prensa sobre la medianoche del lunes, la alcaldesa del condado, Daniella Levine Cava, y el jefe de la Policía local, Alfredo Ramírez, pidieron la solidaridad de la comunidad con el agente y su familia.
El año pasado, los agentes del FBI Daniel Alfin y Laura Schwartzenberger murieron a balazos en Sunrise, al noroeste de Miami, a manos de un sospechoso de poseer pornografía infantil que les disparó desde su vivienda.