“Este es el momento que nos gusta recordar a los residentes que incluso a finales de la temporada aún podíamos ver el potencial del clima tropical", dijo Aaron Miller, director de Seguridad Nacional y Preparación para Emergencias de la Oficina del Alcalde de Nueva Orleans, Mitch Landrieu.
Miller dijo que los funcionarios planean reunirse desde este jueves con la Junta de Agua y Alcantarillado para discutir los preparativos y la condición del sistema de drenaje de Nueva Orleans.
Agregó que el Servicio Nacional del Clima (NWS) deberá tener en las próximas horas una idea más clara de hacia dónde se dirigirá la tormenta.
Las redes de tuberías de drenaje, las alcantarillas, los canales, las bombas y los generadores de la ciudad han mejorado desde que una inundación el pasado 5 de agosto reveló que 17 bombas y tres de los cinco generadores de turbina de la central de Carrollton estaban sin funcionar.
La Junta de Agua y Alcantarillado ha reparado una segunda turbina de vapor utilizada para alimentar su sistema de drenaje. La ciudad también tiene 26 generadores de electricidad de emergencia desplegados para respaldar en caso de cortes de energía eléctrica.
El Centro Nacional de Huracanes en Miami informó que la tormenta tropical Nate se formó este jueves en el Caribe, cerca de la costa de Nicaragua, y representa una amenaza de inundaciones además para Honduras, Yucatán (México) y la costa del Golfo de Estados Unidos.
Nate se encontraba la mañana de este jueves a 15 kilómetros al sur de Puerto Cabezas, Nicaragua, y tiene vientos máximos sostenidos de 65 kilómetros por hora. Se espera conforme avance hacia aguas del Golfo de México que se convierta en un huracán mínimo.
Nate se mueve hacia el noroeste a cerca de 13 kilómetros por hora y se pronostica un movimiento hacia el norte noroeste a una velocidad de traslación más rápida comience este jueves y continúe hasta el viernes en la noche.