Niños méxico-canadienses disfrutan en Toronto tradición de las posadas

12 de Diciembre de 2016
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Toronto, 12 Dic (Notimex).- Desde hace casi una década tres madres mexicanas reúnen a familias méxico-canadienses en torno a la tradición de las posadas, con piñatas, churros, tamales y ponche.

La posada es colectiva y las familias llevan comida y regalos para los niños. Aquí todos ponen, todos juegan y todos ganan.

ninos-mexico-canadienses-posadas-1En Canadá, y ya con la nieve asomándose, es difícil “cerrar las calles” y “subirle a la música” para hacer una posada.

En cambio, se hacen en salones cerrados y calientitos, pero adentro el ambiente es muy mexicano con decoraciones de papel picado y el olor a la comida mexicana.

Las piñatas pueden ser de la tradicional estrella pero también de Santa Claus o de muñeco de nieve. No están rellenas de cañas, tejocotes ni jícamas, pero sí de dulces y chocolates.

A lo largo de casi una década los niños mexicano-canadienses de estas familias han aprendido y disfrutado de las posadas al estilo mexicano, con piñatas, ponche, churros, aguinaldos y música mexicana.

Sin importar que afuera la temperatura esté a menos cero grados, adentro cobija el calor mexicano y solidario de papás que llevan regalos para todos los niños.

Claudia Rodríguez, una de las organizadoras, llegó a Canadá hace 12 años, y no ha perdido el espíritu navideño al estilo México.
“Hacemos esta posada porque los niños que nacieron acá o los trajeron muy pequeñitos y no tienen la costumbre mexicana de las posadas, así que les inculcamos los valores y la tradición mexicana”.

En tanto, Angeles Niembro añadió que esta actividad sirve para recordar las raíces mexicanas y para reunir a las familias, incluyendo a niños especiales.

ninos-mexico-canadienses-posadas-2“Soy madre de un niño especial e invito a otras madres especiales y junto con todos los niños la pasamos muy bien, tenemos piñatas y traemos comida para compartir, sin olvidar nuestras tradiciones mexicanas”.

Ana Garay es la tercera coorganizadora de esta fiesta y le pone la diversión con sus habilidades para hacer juegos con niños.

Zoran Kostic, esposo de Ana, es un canadiense que ha aprendido cómo son las posadas mexicanas y las disfruta mucho.

“Ha sido un gran placer conocer a través de mi esposa a más amigos mexicanos y conocer sus tradiciones, hablar un poco su idioma… Me gusta ver a varios niños disfrutando de las piñatas y pasándola bien”.

En esta posada, realizada este fin de semana, por más de cinco horas los niños le dieron duro a las piñatas, se llenaron las manos de dulces, jugaron a las “sillitas”, comieron churros, dialogaron con Santa y disfrutaron de la fiesta decembrina.

El niño Emilio Moctezuma Martínez, de ocho años, nació en Canadá y es hijo de padres mexicanos: “Me gustan las posadas porque me gusta pegarle a las piñatas y romperlas para agarrar muchos dulces”, dijo en un perfecto español.

En Toronto se organizan cada vez más posadas, como la del Grupo Enlace Community Inc, que realiza durante el año actividades recreacionales con los jornaleros mexicanos. A algunas posadas llegan los Tres Reyes Magos, a otras Santa Claus, pero los festejados especiales son estos niños latino-canadienses.