El apoyo fue ordenado tras el informe que rindió al mandatario Ahmed Rufai Abubakar, enviado especial quien se reunió con el presidente sudafricano Cyril Ramaphosa este fin de semana para obtener información de primera mano sobre la situación.
El mandatario sudafricano condenó la violencia que lleva ya algunas semanas contra extranjeros residentes en su país, y se comprometió a hacer todo lo posible por proteger a todos los extranjeros, incluidos los llegados de Nigeria, informó el Daily Post.
Pese a las palabras de Ramaphosa las agresiones a extranjeros han continuado en Sudáfrica, donde este domingo hubo nuevas expresiones xenófobas en el distrito financiero de Johannesburgo.
Se trató de actos vandálicos donde resultaron dañados automóviles, edificios y tiendas, muchas de las cuales no pertenecían a extranjeros, dijo el jefe de la policía local David Tembe.
La violencia xenófoba ha afectado a ciudadanos provenientes de Botswana, Ghana, Kenia, Madagascar, Nigeria, Tanzania y Zambia.
Los sudafricanos exigen la salida de todos los extranjeros a quienes acusan de promover el tráfico de drogas o de personas.
En un comunicado publicado en Twitter, el capítulo nigeriano de Amnistía Internacional (AI) denunció que esta violencia xenófoba no es nueva sino que comenzó a surgir desde 2008 sin que los gobiernos sudafricanos hayan tomado medidas.
Algunos políticos han alimentado la situación, como el entonces ministro de Salud, Aaron Motsoaledi, ahora de Asuntos Internos, quien acusó a la población extranjera de saturar el sistema de salud sudafricano, añadió AI.