Caracas, 14 Dic (Notimex).- El Gobierno de Venezuela, en su empeño de estatizar la economía, generó una inflación sin precedentes, cuyo resultado fue un mayor desabastecimiento y una prolongada escasez de alimentos, señaló la economista y costumbrista, María Pilar Romero.
“Ese modelo económico ‘sepultó' asimismo las más hermosas tradiciones culinarias de Venezuela y las emblemáticas hallacas y el pan de jamón pasaron a formar parte del pasado”, precisó la autora del libro “Tradiciones Culinarias de Venezuela”.
En entrevista con Notimex, Romero explicó que la tradicional hallaca venezolana es un pastel de harina de maíz -especie de tamal- relleno de un guiso de carne o pollo aderezado con aceitunas, alcaparras, uvas pasas y envuelto en hojas ahumadas de plátano.
Afirmó que el principal ingrediente para la preparación de este tradicional platillo, como es la harina de maíz precocida, desapareció en su totalidad y la carne y el pollo si se consiguen tienen precios exorbitantes “ni hablar de las aceitunas, alcaparras y pasas, que son productos importados”.
La experta advirtió que el pan de jamón, de factura venezolana, tampoco podrá degustarse en esta Navidad debido a la escasez de harina de trigo, ya que este cereal no se produce en el país y su importación se redujo de manera drástica por la falta de divisas.
“Los venezolanos deben olvidarse que en este país existió el popular y delicioso pan de jamón, convidado de honor en la cena de Navidad, pues la inflación y las desacertadas medidas económicas del gobierno acabaron por enterrar esta tradición”, lamentó la experta.
Romero explicó que la mayoría de los ingredientes de este rico pan navideño (pasas, aceitunas, levadura y harina) son importados y en muchos casos deben traerse a dólar libre, mientras que los componentes nacionales (jamón y tocino) suben de precio de manera constante.
Destacó que las proyecciones técnicas de la Federación de Trabajadores de la Harina (Fetraharina) reflejan que el precio de un pan de jamón al comienzo de la temporada navideña estará entre ocho mil y 10 mil bolívares debido a la elevada inflación.
Reiteró que por todo lo expuesto “el pan de jamón, quedará para el recuerdo de los más adultos, quienes con suerte tuvieron la dicha de conocerlo y disfrutarlo”.
“Ese modelo económico ‘sepultó' asimismo las más hermosas tradiciones culinarias de Venezuela y las emblemáticas hallacas y el pan de jamón pasaron a formar parte del pasado”, precisó la autora del libro “Tradiciones Culinarias de Venezuela”.
En entrevista con Notimex, Romero explicó que la tradicional hallaca venezolana es un pastel de harina de maíz -especie de tamal- relleno de un guiso de carne o pollo aderezado con aceitunas, alcaparras, uvas pasas y envuelto en hojas ahumadas de plátano.
Afirmó que el principal ingrediente para la preparación de este tradicional platillo, como es la harina de maíz precocida, desapareció en su totalidad y la carne y el pollo si se consiguen tienen precios exorbitantes “ni hablar de las aceitunas, alcaparras y pasas, que son productos importados”.
La experta advirtió que el pan de jamón, de factura venezolana, tampoco podrá degustarse en esta Navidad debido a la escasez de harina de trigo, ya que este cereal no se produce en el país y su importación se redujo de manera drástica por la falta de divisas.
“Los venezolanos deben olvidarse que en este país existió el popular y delicioso pan de jamón, convidado de honor en la cena de Navidad, pues la inflación y las desacertadas medidas económicas del gobierno acabaron por enterrar esta tradición”, lamentó la experta.
Romero explicó que la mayoría de los ingredientes de este rico pan navideño (pasas, aceitunas, levadura y harina) son importados y en muchos casos deben traerse a dólar libre, mientras que los componentes nacionales (jamón y tocino) suben de precio de manera constante.
Destacó que las proyecciones técnicas de la Federación de Trabajadores de la Harina (Fetraharina) reflejan que el precio de un pan de jamón al comienzo de la temporada navideña estará entre ocho mil y 10 mil bolívares debido a la elevada inflación.
Reiteró que por todo lo expuesto “el pan de jamón, quedará para el recuerdo de los más adultos, quienes con suerte tuvieron la dicha de conocerlo y disfrutarlo”.