Ginebra, 01 mar (EFE).- Más de 150.000 ucranianos han huido del país en guerra en menos de 24 horas, lo que implica que el número de refugiados que han entrado a alguno de los países vecinos llega ahora a los 677.000, dijo el alto comisionado de la ONU para los refugiados, Filippo Grandi.
Más de la mitad de todos los refugiados se encuentran en Polonia, mientras que 90.000 han llegado a Hungría, 60.000 a Moldavia, 50.000 a Eslovaquia y 40.000 a Rumanía, precisó Grandi en una conferencia de prensa en la que se presentó una petición urgente de fondos de la ONU para afrontar esta nueva crisis.
Los fondos necesarios se elevan a 1.100 millones de dólares para financiar durante los próximos tres meses las operaciones humanitarias en favor de seis millones de personas en Ucrania y en los países vecinos receptores de refugiados.
Entre las prioridades de la operación humanitaria estará, por ejemplo, rehabilitar infraestructura esencial que haya sido dañada, ofrecer acceso a la atención médica y apoyar a las personas que han perdido toda fuente de ingresos, como los jubilados que han dejado de percibir sus pensiones.
No obstante, incluso si los recursos financieros llegan, Griffiths recordó que es fundamental que el personal humanitario sea protegido y tenga acceso a las víctimas del conflicto, lo cual únicamente puede ser garantizado por las partes del conflicto.
Grandi dijo que "el llamamiento más urgente que hacemos es que se detengan las hostilidades. A menos que esto pare veremos que aumentarán los desplazamientos fuera y dentro de Ucrania".
Confirmó que en estos momentos hay colas de decenas de kilómetros en las fronteras occidentales de Ucrania con docenas de miles de personas que desean abandonar el país por temor a los bombardeos rusos.
Según el alto comisionado, la primera oleada de refugiados que sale de Ucrania está compuesta en una buena parte por personas con algunos recursos o con familiares o amistades en otros países de Europa, pero sostuvo que si la guerra continúa empezaran a salir "gente con menos recursos y conexiones" y que dependerán fundamentalmente de la ayuda humanitaria.
Ambos representantes de la ONU pusieron una nota de optimismo al comentar que, como en ninguna crisis del pasado reciente, sus organizaciones empezaron a recibir ya en los primeros días del conflicto donaciones individuales y de empresas, incluso antes de solicitarlas, para atender la crisis en Ucrania.