En total fueron 127 mil 700 los venezolanos que desde 2017 y hasta el primer semestre del año entraron a Brasil por la frontera terrestre de la Amazonía, en el estado de Roraima, de acuerdo con las cifras oficiales.
Sin embargo, de ese número casi 69 mil salieron del país con destino a una tercera nación.
Desde el recrudecimiento de la crisis política, económica y social en Venezuela, cientos de miles de venezolanos salieron de su país hacia destinos como Colombia, Brasil o Estados Unidos, y se estima que el número total podría ser cercano al millón y medio.
En Brasil, donde el gobierno del presidente Michel Temer aseguró que no cerraría la frontera norte para frenar la llegada de los venezolanos, el número de venezolanos que pidieron refugio en el país creció casi un 100 por ciento en los primeros seis meses respecto al mismo período de 2017, totalizando 35 mil personas.
Unos cuatro mil venezolanos viven en centros de acogida en Boa Vista, capital del estado de Roraima, y en la ciudad fronteriza de Paracaima, donde se calcula que en conjunto residen unos 30 mil venezolanos.
Las autoridades de Roraima aseguran que los servicios sociales del estado –educación y sanidad- están saturados por la llegada de miles de inmigrantes en los últimos meses, y culpan al gobierno federal de no haber transferido recursos económicos para lidiar con la situación.