En un comunicado emitido este martes, el organismo humanitario expresó que la OEA debe advertir a Nicaragua que ningún gobierno está por encima del escrutinio ni de la condena de la comunidad internacional.
“El respeto y la garantía de los derechos humanos consagrados en la Convención Americana no son negociables”, afirmó la directora para América de AI, Érika Guevara Rosas.
El organismo emitió este comunicado en respuesta al “proyecto de declaración de apoyo al pueblo de Nicaragua” presentado por las misiones permanentes de Estados Unidos y Nicaragua para ser discutido y votado en la Asamblea General de la OEA.
“Los Estados miembros de la OEA no deben darle la espalda al pueblo nicaragüense cuando los necesita. El gobierno del presidente (Daniel) Ortega no ha mostrado la menor inclinación a poner fin a su política sistemática de represión violenta”, apuntó Guevara Rosas.
Luego de dos meses, la represión en Nicaragua ha causado la muerte de más 100 personas, por lo que Guevara Rosas señaló que “si los países de la región ignoran la responsabilidad del gobierno por estas atrocidades serán cómplices de la matanza continua de manifestantes y civiles”.
Aseguró que las personas valientes, los defensores de los derechos humanos y las organizaciones de la sociedad civil de Nicaragua necesitan mucho más que tímidas condolencias y generalizaciones.
“Necesitan un compromiso firme para garantizar que las ejecuciones extrajudiciales y otras violaciones graves de los derechos humanos no se repitan y queden impunes. El verdadero apoyo al pueblo nicaragüense significaría hacer que el Estado cumpla con sus obligaciones internacionales”, según AI.