Esa decisión de la iniciativa generó una fuerte polémica en Alemania, con corrientes de opinión a favor y en contra.
El debate social tiene como "fondo" la llegada de alrededor de un millón de refugiados a este país desde el segundo semestre de 2015.
Un amplio sector de alemanes de diferentes clases sociales está en contra de la llegada de los refugiados procedentes de países con conflictos bélicos y de naciones pobres.
Essener Tafel argumentó que tomó la medida ante el incremento de extranjeros que acudían por la ayuda, y por el aumento de casos de alemanes necesitados que se quedaban con las manos vacías.
A partir de este miércoles, las prioridades son sin importar la nacionalidad que acredite el pasaporte de la persona: mayores de 50 años, discapacitados, madres o padres solteros y familias con menores de edad, precisó la iniciativa filantrópica.
Essener Tafel suministra alimentos a carca de 16 mil personas de escasos recursos, luego de registrarlos y otorgarles una tarjeta que los acredita como beneficiarios.
Contra lo que se esperaba, este miércoles no se formaron largas filas para registrarse y recibir los vales. En la fila había tanto alemanes como extranjeros. La cifra corresponde a un día normal en el trabajo de esa asociación filantrópica, según sus propias informaciones.
La Essener Tafel se financía sólo de donativos, el trabajo que prestan sus miembros es gratuito, y también se recolectan los víveres que desechan los supermercados por estar cerca de caducar y hacere espacio para los productos recientes.