“Sólo acabaremos con el estado de emergencia cuando no haya necesidad de luchar contra el terrorismo. Hemos ganado terreno en la lucha contra la cofradía del clérigo Fethullah Gülen y contra la guerrilla kurda . Así que es posible levantar el estado de emergencia en un futuro no muy lejano”, dijo.
Precisó que los juicios contra los golpistas están tomando forma poco a poco y las fuerzas turcas han recorrido un importante trecho en la lucha contra el proscrito Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK), considerado por Ankara como una organización terrorista.
En su discurso ante inversores extranjeros en la Cámara de Comercio de Turquía, Erdogan afirmó que por el momento continuará el estado de emergencia, el cual ha sido prorrogado cada tres meses desde la intentona golpista, informó el diario local The Hürriyet.
Indicó que se puede hablar de revocar el estado de emergencia con todo lo que está pasando en Turquía, en alusión a las más de 200 órdenes de detención que la Fiscalía ha emitido esta semana contra periodistas, académicos y trabajadores del sector tecnológico por sus presuntos nexos con Gülen.
Los críticos con el gobierno turco han denunciado que con el estado de emergencia Erdogan ha usado los poderes especiales para lanzar una purga, pues desde hace un año más de 50 mil personas han sido detenidas y unos 150 mil funcionaros han sido despedidos por sus supuestos vínculos con Gülen.
El gobierno turco declaró el estado de emergencia el 20 de julio de 2016, cinco días después del intento de golpe de Estado, con el objetivo de limpiar las instituciones estatales de los miembros de la Organización Terrorista Fethullahista (FETÖ).