En un comunicado, el organismos internacional denunció que la violencia en Siria ha empeorado en varias regiones, provocando en pocos días la muerte de cientos de civiles, además de la destrución de zonas residenciales, hospitales y escuelas.
"Durante las dos últimas semanas, hemos visto un aumento cada vez más preocupante en las operaciones militares que se correlacionan con altos niveles de víctimas civiles", indicó Marianne Gasser jefa de la delegación del CICR en Siria.
Mis colegas, agregó, relatan historias desgarradoras, como la de una familia de 13 personas que huyeron de la norteña ciudad siria de Deir Ezzor "sólo para perder a 10 de sus miembros a ataques aéreos y dispositivos explosivos en el camino".
De acuerdo con el CICR, la violencia no sólo se está produciendo en las ciudades de Raqqa, Deir Ezzor y en el oeste de Alepo, sino también en muchas otras áreas, como Idlib, Hama y el oriente de Ghout, donde en conjunto, se registran "los peores niveles de violencia desde la batalla de Alepo en 2016".
"Si bien los últimos meses habían proporcionado algunas razones para tener esperanzas, el retorno a la violencia vuelve a traer niveles intolerables de sufrimiento a amplias zonas del país, al tiempo que disminuye el acceso de los organismos humanitarios", indicó Gasser.
El CICR, con sede en esta ciudad, destacó que en los último 10 días más de una decena de hospitales han sido dañados, cortando el acceso y la asistencia médica básica a cientos de miles de personas.
Además, la lucha actual en torno a la ciudad de Deir Ezzor está poniendo en peligro el abastecimiento de agua, lo que ha llevado a que un creciente número de civiles huyan a los campamentos ubicados alrededor de Raqqa y en otras zonas, los cuales reciben cada día más de mil mujeres, niños y hombres.
"Las operaciones militares no deben hacer caso omiso del destino de los civiles y de la infraestructura vital de la que depende su supervivencia", indicó, por su parte, Robert Mardini, director regional del CICR para Oriente Próximo y Medio Oriente.
"Ganar por cualquier medio no sólo es ilegal, sino también inaceptable cuando se trata de un costo humano. Llamamos una vez más a todos los que luchan en Siria a que muestren moderación y acaten los principios básicos del derecho internacional humanitario", subrayó.
Desde marzo de 2011, Siria vive sumergida un conflicto armado entre las tropas gubernamentales, que enfrentan a grupos armados de la oposición y organizaciones terroristas, que han causado la muerte de miles de personas.