Santa Cruz de La Palma, 11 oct (EFE).- Las autoridades de la isla canaria de La Palma ordenaron hoy el confinamiento de casi 3.000 personas que residen en las proximidades de una fábrica de cementos que ha entrado en combustión al contacto la lava que sigue manando del volcán de Cumbre Vieja, lo que está provocando emisión de gases.
El Plan Especial de Protección frente a Riesgo Volcánico de Canarias (Pevolca) informó de que se ha adoptado esta decisión en tanto se analizan, en las próximas horas, los gases procedentes de ese punto.
La tercera semana de erupción del volcán Cumbre Vieja, cuya lava afecta ya a una superficie de 525,77 hectáreas (33,02 más que el día previo), mantiene a los servicios de emergencia muy pendientes de la nueva colada que discurre al norte de la principal, porque puede destruir zonas que habían quedado a salvo en los primeros días.
También preocupa el cambio de viento, que amenaza con volver a dejar inoperativo el aeropuerto de La Palma, como ya ocurrió la semana pasada.
Pese a los nuevos derrumbes del cono ayer, no es esperable que las nuevas coladas de lava cambien la trayectoria que ya están siguiendo en superficie.
Según el último informe del Departamento de Seguridad Nacional del Gobierno de España, transcurridas tres semanas del inicio de la erupción, siguen activos los centros de emisión del cráter.
La constante actividad efusiva ha ampliado las coladas por el norte, continuando su descenso hacia una zona que no había resultado afectada por la colada principal.