Nasser Musabeh estaba entre los siete manifestantes que, según los funcionarios de salud de Gaza, fueron asesinados por tropas israelíes en la jornada de protestas más sangrienta desde el pasado 14 de mayo, cuando 60 personas murieron en las manifestaciones contra el traslado de la embajada de Estados Unidos a Jerusalén.
Las protestas comenzaron en marzo y recientemente se aceleraron después del último fracaso para negociar una flexibilización del bloqueo de la frontera de 11 años de Gaza.
Israel y Egipto impusieron el cierre después de que el militante islámico Hamas se apoderara de Gaza en 2007.
En el transcurso de este viernes de protestas contra el bloqueo de Israel y para exigir el retorno a las tierras de las que fueron expulsados, según estas mismas fuentes sanitarias, 506 personas han resultado heridas.
Además entre los lesionados, 90 recibieron impactos de bala y tres se encuentran en estado crítico. Dos de los heridos son periodistas y cuatro son paramédicos.
Durante toda la semana se han producido altercados entre los militares israelíes y grupos de jóvenes palestinos pero, según un comunicado hecho público el viernes por el ejército israelí, en la protesta de este viernes han participado unas 20 mil personas.
En un comunicado, el ejército indicó que "más de 20 mil alborotadores y manifestantes" congregados en varios lugares fueron "parte de los violentos disturbios a lo largo de la valla de seguridad de la Franja de Gaza" y asegura que han lanzado granadas, artefactos explosivos y piedras contra sus soldados.
"Las tropas están respondiendo con medios de dispersión antidisturbios y están disparando de acuerdo con los procedimientos operativos estándar", añadía la nota militar.
Además, el ejército informaba que en respuesta a las granadas y a los artefactos explosivos que se habían lanzado contra las tropas, un avión había efectuado "un ataque" en el norte de la Franja de Gaza.
Los incidentes más violentos se produjeron en las inmediaciones del paso fronterizo de Karni, en el noreste de la Franja y en las inmediaciones de Jan Yunes, en el sureste del territorio palestino.
Después de semanas de relativa calma —según fuentes palestinas, fruto de una tregua alcanzada entre Israel y Hamás bajo los auspicios de Egipto para evitar una escalada de violencia— los palestinos han vuelto a reeditar las protestas masivas en la frontera.
Estas marchas se producen en el marco de la Gran Marcha de Retorno, que reivindica el derecho a regresar de todos los refugiados palestinos. Al menos 190 manifestantes han muerto desde el inicio de las protestas el pasado 30 de marzo.