Berlín, 15 May (Notimex).- El ministro alemán del Exterior, Guido Westerwelle, tomó hoy una posición fuerte a favor de la entrada de Turquía a la Unión Europea.
En un artículo escrito a cuatro manos junto con su homólogo turco Ahmet Davutoglu para el diario Frankfurter Allgemeine Zeitung, el principal diario alemán de derecha, ambos se expresaron a favor de "dar nuevo impulso al proceso de integración de Turquía en el club de Bruselas".
Se trata de una señal pronunciada hacia lo que se perfila como un cambio de tendencia con respecto a la política exterior de Alemania hasta ahora y que podría desbloquear la parálisis de la situación de Turquía con respecto a la Unión Europea.
Francia y Alemania se han opuesto hasta ahora de manera frontal a la extensión de las fronteras de la Unión hasta más allá del estrecho del Bósforo.
Otros grandes países se expresaron ya hace tiempo a favor de una apertura hacia Turquía: España, Italia, Gran Bretaña y hasta Grecia ?que en el pasado vivió tensiones con Ankara? están ya a favor.
"Turquía cumplió reformas decisivas que respetan los valores fundacionales de la UE como la democracia, los derechos humanos y el estado de derecho", escribieron los ministros, "el éxito de estos cambios tendrá ahora que reflejarse de manera positiva (...) en Bruselas".
No se indicaron ni tiempos, ni modalidades, sin embargo es un paso adelante: sólo hace un mes la canciller federal Ángela Merkel se mantuvo muy prudente en un viaje oficial a Turquía.
En esta ocasión recibió duras críticas por parte del Comisario para la Energía de la UE, el político alemán Günter Oettinger: "Llegará un día en que la canciller federal deberá pedir de rodillas a Ankara que entre en la UE".
La historia de la relación entre Turquía e instituciones europeas es largo y atormentado. Ankara manifestó su deseo de entrar en la Comunidad Europea ya en los años 1960.
Diferencias y resistencias internas atrasaron de hecho las negociaciones y se adelantaron a Turquía, como por ejemplo Dinamarca, Grecia, Irlanda y Gran Bretaña, que pidieron entrar en 1973.
Mientras tanto la Comunidad Europea se transformó en UE. Desde 1999 Turquía pidió formalmente a entrar en la unión, aunque Bruselas privilegió los países del este: se abrió a Rumania, Bulgaria y en julio de este año incluirá a Croacia.
La preocupación de Alemania siempre estuvo determinada por un factor de política interior: la enorme comunidad turca en el país fue en algunos casos objeto de críticas por su escasa integración.
"Después de cincuenta años de inmigración tenemos que reconocer que unidad y actitud pacífica determinaron la presencia de la comunidad turca en Alemania", reconocieron los ministros.
Se añade por un lado que ahora la economía turca tiene un crecimiento del 6.0 por ciento, mientras la Eurozona se encuentra en recesión.
Además, las tensiones en la frontera con Siria han acercado la UE a Turquía. Para Bruselas, Ankara es un socio estratégico en Medio Oriente. Para Turquía el apoyo de la UE es fundamental por su seguridad.
Abre Alemania la puerta a Turquía en la Unión Europea
15
de Mayo
de
2013
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