“Creo que invocar una palabra como es el demonio es muy fuerte, siempre hay que tenerle respeto y por lo mismo les he dicho a mis actores que tengan cuidado”, dijo el productor Eduardo López, al recordar que desde hace más de cuatro décadas esta historia ha estado llena de mitos y supersticiones, al grado que la han catalogado como “maldita”.
En declaraciones a Notimex, el encargado de traer este montaje a México, aseguró que pese a no ser supersticioso, prefiere no confiarse y dar una limpia al Teatro Ramiro Jiménez, para quitar malas energías.
Destacó que la próxima semana se realizará una ceremonia para prevenirse, en la que limpiarán cada rincón del inmueble, a fin de estar más tranquilos y que el elenco también se sienta seguro.
López afirmó que, aunque los ensayos han transcurrido sin contratiempos, muchas veces el hacer una historia basada en el terror, que por su naturaleza invoca a las fuerzas del mal, causa un tanto de intranquilidad.
En ocasiones cualquier hecho que pasa dentro de la compañía se asocia con las supersticiones de la trama, como ocurrió durante un ensayo de la pequeña actriz Patty Larrañaga, quien se golpeó la cabeza con un cubo de madera y requirió de cinco puntadas, que la hicieron usar collarín.
Sin embargo, aseguró que El exorcista es considerada como una historia de culto y que por primera vez llega a México, con la adaptación de John Pielmeier, mientras que para los efectos especiales se ha rodeado de mexicanos especialistas en la materia.
Por su parte, la actriz Cynthia Klitbo, aunque es fanática del género del terror y el suspenso, guarda su debido respeto al montaje y trata de no sugestionarse.
"Debo de reconocer que me da un poco de miedo, porque ya hay suficientes malas vibras en la vida, pero es un reto hacer esta historia sobre una pequeña que está poseída.
“Creo que es normal experimentar cierto temor, por lo bien que están recreadas las atmósferas y los efectos especiales que no le piden nada a la película”, añadió la villana de telenovelas, quien se mostró confiada en que esta versión teatral logrará su cometido, porque en México se consume muy bien el terror.
Reconoció que a pesar de que es una persona extremadamente religiosa, cree en la fuerza de la historia y su mensaje, porque a su parecer es la tesis de la vida, “la eterna lucha entre el bien y el mal; pero también les digo que si veo algo fuera de lo normal dejaré la obra”.
Klitbo señaló que no ha hecho rituales o cosas por el estilo para protegerse, pues cree en las cosas buenas de la vida y “eso lo atraes. Creo que todos estamos hechos de polvo de estrella y tenemos una energía divina que es la que nos cuida”.
“Hay que pensar en las cosas buenas y no sugestionarnos”, dijo la actriz, quien dará vida a la madre de Regan MacNeil, personaje que alternará con Anna Ciocchetti, quien ve el montaje como una oportunidad de seguir experimentando con producciones que pueden competir a nivel internacional.
La puesta en escena, que estrenará el 5 de julio próximo, está integrada por Patty Larrañaga, Paola Meixueiro, Cynthia Klitbo, Anna Ciocchetti, Sergio Klainer y Diego de Erice.