México, 3 Ene (Notimex).- Para Gon Curiel, ser el único “standupero” en México con un espectáculo ciento por ciento libre de “malas palabras”, ha sido una misión difícil mas no imposible.
Además, el comediante se ha auxiliado en las nuevas tecnologías para convertir su espectáculo en algo totalmente interactivo. “Tenemos que ir evolucionando, no podemos quedarnos atrás”, señaló mediante un comunicado.
“Hoy más que nunca estoy comprometido con el “Stand up comedy”. Hay que estar más “pilas”, porque se debe ir improvisando según el público lo vaya pidiendo y nosotros lo hacemos con controles remotos que le damos a la gente, que les permiten participar en el rumbo que va tomando el ‘show’”, comentó.
Curiel, quien en 2015 logró colocar su espectáculo semanal en solitario durante varios meses en un foro teatral, explicó que cada noche es diferente, lo cual lo hace más complicado, pero a la vez interesante.
“De esa manera el espectáculo siempre es nuevo, nunca se repite, y conseguimos no sólo las carcajadas del público, sino la frescura de que cada semana haya algo nuevo, incluso para mí”, destacó.
Otro reto superado, y del cual se siente igualmente orgulloso, es haber logrado escribir un espectáculo completamente libre de groserías, lo cual, reconoce, pareciera de pronto un nado contra corriente para un ‘show’ de comedia, en un país donde somos especialistas en el albur y el doble sentido, pero “sí se puede”.
“La idea es que un espectáculo no necesita de malas palabras para funcionar, pues la comedia no se nutre necesariamente de la grosería, aunque, terminar un chiste con una “palabrota” siempre será tentador, pues arranca una risa más fácil”, dijo.
En su caso, añadió, lo ha podido hacer porque se ha empeñado en pulir la comedia que escribe, de tal forma que la primera vez que lo hizo así y lo mencionó al público al final, este se mostró sorprendido porque entre tanta risa ni siquiera se había percatado de ese detalle.
Eso, además, le ha abierto las puertas a otro tipo de público, porque si bien aún toca temas adultos, ya es una propuesta más familiar.
“Hoy en día hay muchas series de televisión y películas que no tienen malas palabras y eso no parece antinatural porque están bien escritas, entonces ¿por qué no habría de pasar lo mismo con un espectáculo de stand up comedy?”, añadió.
Económicamente, dice, le fue como nunca, pues se consolidó como el comediante de “Stand Up” número uno en eventos corporativos, pero en 2016, buscará llevar su comedia más lejos, a cada rincón del país, volviéndose más conocido como el creador de una comedia con sello propio, bien escrita, con lenguaje accesible, y que se retroalimenta de sus audiencias, finalizó el documento.