Aunque ya ha tenido oportunidad de experimentar indirectamente lo que supone tener que cuidar y responsabilizarse de un niño pequeño en su condición de padrastro del pequeño Flynn (7) -hijo de su esposa Miranda Kerr y el exmarido de ella, Orlando Bloom-, el empresario Evan Spiegel todavía está tratando de asimilar los muchos cambios que se han producido en su vida desde la llegada, el mes pasado, de su hijo Hart, fruto de su envidiable matrimonio con la modelo australiana.
"Estrenarse en la paternidad es algo imposible de describir. Es un acontecimiento que ha transformado por completo mi día a día", se ha sincerado el fundador de la red social Snapchat en conversación con el portal de noticias E! News, antes de desvelar que en su primer Día del Padre recibió un regalo muy especial por parte de su esposa.
"Ahora tengo la típica parrilla de padre para hacer barbacoas, lo cual es una novedad bastante positiva", ha bromeado en la misma conversación.
Al margen del sinfín de tareas adicionales que pueblan su agenda diaria desde el nacimiento de su primogénito, lo cierto es que Evan no ha descuidado en ningún momento el importante papel que juega en la vida del mencionado Flynn, al que, entre otras muchas cosas, le ha venido inculcando la misma pasión que siente él por la tecnología.
"Flynn tiene solo siete años pero ya está todo el día con su iPod. Nos mandamos emails y los suyos están llenos de emojis. Eso es buena señal", ha explicado sobre lo familiarizado que está el pequeño con todos los avances electrónicos del siglo XXI.