Ha sido el diario regional La Nueva España el que ha dado a conocer la llegada de los dos enamorados a la encantadora ciudad norteña por medio de una llamativa fotografía publicada en su página web, en la que aparecen Paula y Miguel sentados junto a los padres de la intérprete en la terraza de uno de sus establecimientos favoritos.
Pese a que es probable que el jugador del Málaga ya conociera a sus suegros, la forma en que el deportista se ha adentrado de lleno en el entorno más íntimo y personal de su chica parece indicar que ambos se encuentran ya en una fase mucho más significativa de su vínculo sentimental.
Buena parte de los seguidores de la estrella televisiva, quien este mismo año ponía legalmente fin a su matrimonio de diez años con el cantante David Bustamante -con el que tiene a su hija Daniella-, se preguntaban hace escasas semanas si la decisión que había tomado la intérprete de celebrar su 41 cumpleaños en Cádiz -por regla general lo hace en Candás- estaba ligada a una hipotética reticencia a llevar a su nueva pareja a su ciudad, al menos tan pronto: una teoría que ha quedado definitivamente descartada a la vista de la naturalidad con la que ambos están disfrutando de estos últimos días de descanso estival.
Sin embargo, y más allá de las implicaciones que tiene para su historia de amor una visita de estas características, de momento Paula y Miguel han dejado bien claro que no tienen "intención" alguna de precipitarse a la hora de quemar etapas en su relación a la velocidad con la que lo suelen hacer otras celebridades, como aseguraba la propia intérprete hace unas semanas al rechazar de plano la posibilidad de que estén sonando otra vez campanas de boda en el horizonte.
"De boda nada, no tengo intención de casarme tan pronto, ni que estuviera loca", explicaba la artista al diario La Razón tras señalar que su relación con Miguel era "seria y maravillosa".