México, agosto (SEMlac).- Magdalena Velarde Tepos afirma que escuchar la sentencia contra Led Clemente Sandoval como responsable del feminicidio de su hija -Fernanda Sánchez Velarde, quien tenía cuatro meses de embarazo-, no solo le da tranquilidad, sino también "algo de felicidad".
Ocho años después del asesinato de Fernanda, escuchar la sentencia emitida la tarde del pasado lunes en el Juzgado Penal de Cuautitlán, de 69 años con tres meses por el crimen de su hija y por provocar el aborto de su nieto, le dio algo de paz, aunque sabe que "eso no le va a devolver a Fernanda, él (Led Clemente Sandoval) pagará por lo que le hizo, al hijo que llevaba en el vientre, a su hijo que entonces tenía un año 10 meses y toda su familia".
Tras la audiencia de juicio, en su casa y luego de que la justicia se hizo, vinieron a ella muchos recuerdos, en especial los de su amorosa hija y quien le dejó una lección de vida: nunca hay que guardarse los sentimientos, hay que abrazar a nuestros hijos e hijas y decirles siempre cuánto los amamos, dice.
Fernanda tenía 18 años cuando fue asesinada por su pareja, un 4 de enero de 2014. La Fiscalía del Estado de México aceptó con prontitud que había sido un suicidio, gracias a la complicidad de tres elementos de la Fiscalía de Justicia del Estado de México, la representante del Ministerio Público María D., quien resultó ser tía de Led Clemente Sandoval; una perito que ayudó también a configurar el delito de "suicidio", de nombre Elisa Z. y quien fue omisa frente a las heridas que presentaba el cuerpo de Fernanda, y otra de apellido Vermont, esta última, incluso, amenazó de muerte a la familia: "habrá otro muerto en tu familia", le espetó a la madre en alguna ocasión.
No fue uno, tres años más tarde los dos hijos varones de Magdalena Velarde también fueron asesinados.
Magadalena Velarde, madre de Fernanda, explica que demostrar que no fue un suicidio llevó a la detención de Led Clemente Sandoval, el 29 de marzo de 2021. Así iniciaron las audiencias, a veces hasta seis por mes. De la carpeta de investigación fueron sustraídas muchas fotografías, pero con las que quedaron pudieron demostrar que no fue un suicidio, sino que su hija murió asfixiada por ahorcamiento y que tenía al menos 12 heridas distintas en el cuerpo.
Todo ello fue encubierto por las aún empleadas de las Fiscalía General de Justicia del Estado de México, que incluso consintieron que ya muerta fueran cortadas las venas de Fernanda para ayudar a configurar el supuesto suicidio.
Para Magdalena Velarde Tepos, la sentencia cierra un capítulo en su ardua lucha. La justicia ha llegado para Fernanda y para toda la familia, afirma.
Hace dos años, Velarde Tepos afirmó a SEMlac las muchas dificultades que enfrentaba para ver al hijo de Fernanda, quien aún se encontraba bajo la custodia de su papá, el hoy feminicida sentenciado Led Clemente Sandoval. Tras el feminicidio, los primeros años pudo ver al niño, quien siempre se veía desmejorado y tenía golpes en el cuerpo.
Después cuando Magdalena, quien ha tenido el acompañamiento jurídico del Observatorio Ciudadano Nacional del Feminicidio y del Instituto Mexicano de Derechos Humanos y Democracia, insistió que no era suicidio, sino un feminicidio, no pudo ver más a su nieto, el cual le fue entregado el 30 de marzo del año pasado, siendo ya un niño de nueve años de edad, tras la detención de Led Clemente.
Durante años, trató de que su nieto estuviera con ella, lo que provocó que Dilcia García, Fiscal de Delitos Vinculados a la Violencia de Género, le advirtiera que ya no hiciera nada, porque "si sale algo mal va a ser su culpa, mejor ni le mueva", decía la funcionaria.
José Alberto y Daniel
Magdalena Velarde tiene aún pendiente esclarecer los homicidios de sus otros dos hijos, José Alberto y Daniel, asesinados el 28 de mayo de 2017, justo un día antes de su cumpleaños que ha dejado de festejar porque recuerda que el 29 de mayo los estaba enterrando.
Tengo que "limpiar el nombre de mis hijos". Los dos jóvenes fueron calificados como narcomenudistas, "otra vez pretendían ´justificar´ lo injustificable", dice. Quienes los señalaban de esa manera era la familia de Led Clemente Sandoval, quienes acusaron que por eso los habían asesinado. Sin embargo, para Velarde Tepos nada de lo dicho es verdad y sí recuerda que sus muchachos fueron asesinados porque estaban investigando el asesinato de su hermana.
Yo no tendría que limpiar su nombre, pero lo voy a hacer, explica mientras piensa en que por lo pronto se "quitó un peso de encima", esto tras la sentencia emitida por en el Juzgado Penal de Cuautitlán, de 69 años tres meses de prisión y el pago de 672 mil pesos (33.600 dólares) como reparación del daño.