Cónclave internacional analiza violencia de género

05 de Agosto de 2016
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reportaje
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México, agosto (SEMlac).- Frente a la emergencia creada por nuevas formas y modalidades de violencia contra las mujeres en la región americana, además de las tradicionales, personalidades mundiales concurrieron a un cónclave para explorar soluciones inmediatas.

La ciudad mexicana de Pachuca fue el escenario, los días 26 y 27 de julio, del Diálogo Regional 2016 "Intercambio de buenas prácticas: desafíos y nuevos retos para la erradicación de la violencia contra las mujeres".

Convocaron organismos internacionales como la Organización de los Estados Americanos (OEA), ONU Mujeres y Amnistía Internacional, el Gobierno de México y asociaciones de la sociedad civil, entre otros.

El objetivo fue abordar las diversas expresiones de la violencia contra las mujeres, tanto las nuevas modalidades de agresiones que están teniendo lugar como las ya conocidas, para desarrollar políticas que hagan frente a los elevados índices de inseguridad, impunidad y restricciones a la participación de las mujeres en la sociedad.

En el centro de la reunión estuvo el trabajo de la Convención Interamericana para Prevenir, Sancionar y Erradicar la Violencia contra la Mujer, más conocida como la Convención de Belém do Pará, dependiente de la OEA, el primer instrumento internacional que estableció el derecho de las mujeres a una vida libre de violencia.

También fue el primer órgano en establecer la necesidad de fortalecer la cooperación entre los Estados Parte que suscribieron la Convención para el desarrollo de los mecanismos, políticas, programas y planes con el objetivo de combatir la violencia contra las mujeres.

Un problema público

Numerosos estudios han demostrado que una de cada tres mujeres de la región americana han sido víctimas, en algún momento de su vida, de algún tipo de violencia de género, además de que se han observado nuevas formas de violencia contra las mujeres "cuyo combate no ha corrido a la par de su incidencia", reconoce la Convención de Belém do Pará.

Tras 30 años de lucha de las mujeres y de los movimientos feministas, señala, la comunidad internacional ha reconocido con cada vez más elocuencia que esa violencia es la violación a los derechos humanos "más recurrente y sistemática" y un problema de salud pública, además de una barrera que frena el desarrollo y la democracia de nuestros países y comunidades.

"Hoy, la violencia contra la mujer ha dejado de ser considerada como un problema privado, y es reconocido y tratado como un problema público", agrega.

Entre los objetivos de la reunión estuvo propiciar un espacio de intercambio entre representantes de gobiernos, sociedad civil, academia y organismos internacionales para combatir la violencia cometida en contra de mujeres y niñas en todas sus formas.

También reflexionar sobre los retos que se enfrentan, compartir las experiencias, esfuerzos y compromisos que están teniendo un impacto positivo en el continente y abordar las causas de la violencia a la par que sus efectos con la participación de los distintos países que conforman el continente.

Se realizaron conferencias magistrales sobre impartición de justicia a mujeres, situación actual de la violencia contra ellas, discriminación contra mujeres y niñas, así como el análisis de la nueva configuración política de la agenda de género y el impulso de los mecanismos existentes.

También se habló sobre la importancia de la deconstrucción de estereotipos de género, sobre cómo se puede trabajar por la igualdad, el modelo tradicional de masculinidad y se analizaron asimismo los aspectos sociales y culturales que definen las experiencias desde la diversidad, entre otros muchos temas. Por: Gloria Analco

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