Melbourne, Aus., 30 Ene (Notimex).- Tras su eliminación en semifinales del Abierto de Australia, el tenista suizo Stanislas Wawrinka, señaló que el cansancio mental que arrastra tras una dura temporada 2014 fue la causa de su derrota.
“Estaba muerto mentalmente y sin baterías”, confesó Wawrinka, que cayó ante el serbio Novak Djokovic por 6-7, 6-3, 4-6, 6-4 y 0-6 para despedirse de la posibilidad de convertirse en bicampeón del primer Grand Slam del año.
“Aunque físicamente estoy bien, mentalmente estoy pagando el precio de acabar la temporada con la final de Copa Davis”, señaló “Stan”, quien con Suiza conquistó “La Ensaladera de Plata” en noviembre.
Por ello, apenas ha podido descansar, “no he tenido una pretemporada como tal, y he intentado concentrarme en empezar bien el año, ganando en Madrás (enero) y llegando aquí para hacer lo mejor”, aseguró Wawrinka, cuarto mejor del mundo.
Sin embargo, aceptó que le fue imposible desplegar su mejor juego ante Djokovic, líder del ranking mundial de la ATP. “Creo que hubo muchos altos y bajos, y las condiciones al principio no eran demasiado buenas. La bola volaba, y no eran fáciles de controlar. No fue mi mejor partido desde luego”, lamentó.
“Estaba muerto mentalmente y sin baterías”, confesó Wawrinka, que cayó ante el serbio Novak Djokovic por 6-7, 6-3, 4-6, 6-4 y 0-6 para despedirse de la posibilidad de convertirse en bicampeón del primer Grand Slam del año.
“Aunque físicamente estoy bien, mentalmente estoy pagando el precio de acabar la temporada con la final de Copa Davis”, señaló “Stan”, quien con Suiza conquistó “La Ensaladera de Plata” en noviembre.
Por ello, apenas ha podido descansar, “no he tenido una pretemporada como tal, y he intentado concentrarme en empezar bien el año, ganando en Madrás (enero) y llegando aquí para hacer lo mejor”, aseguró Wawrinka, cuarto mejor del mundo.
Sin embargo, aceptó que le fue imposible desplegar su mejor juego ante Djokovic, líder del ranking mundial de la ATP. “Creo que hubo muchos altos y bajos, y las condiciones al principio no eran demasiado buenas. La bola volaba, y no eran fáciles de controlar. No fue mi mejor partido desde luego”, lamentó.