En una noche donde el glamour se encontró con el fútbol, Lionel Messi y Aitana Bonmatí capturaron todas las miradas en la ceremonia del Balón de Oro en París.
La gala, que se ha convertido en un escenario clave para la promoción de marcas de alta gama, vio a Bonmatí, recién coronada campeona mundial con España, envuelta en un elegante vestido negro de Versace, complementado con deslumbrantes pendientes de Rabat.
Messi, por su parte, hizo honor a su octavo Balón de Oro con un esmoquin negro a medida de Louis Vuitton, obra del multifacético Pharrel Williams, quien añadió discretos toques de su icónico estampado "Damoflage".
Mientras tanto, otras figuras del fútbol femenino español, como Salma Paralluelo y Alba Redondo, también destacaron con atuendos personalizados que fusionaron la sofisticación con la potencia deportiva.
La velada reflejó la estrecha relación entre la moda de lujo y el deporte rey, culminando con la exhibición de los exclusivos baúles de Louis Vuitton diseñados para albergar los codiciados trofeos del Balón de Oro, símbolos de victoria y excelencia en el mundo del fútbol.