La selección de los tres leones actuará como local administrativo en el encuentro de los dos líderes del sector G, que se jugará en el Estadio Kaliningrado a las 13:00 horas (tiempo del centro de México).
Ambas escuadras marchan en lo más alto de su grupo, empatados en diferencia de goles, así como en anotaciones a favor y en contra, por lo que en caso de no haber ganador en el encuentro de mañana, el siguiente factor de desempate será el Juego Limpio.
Previo al partido, la selección de la rosa marcha con leve ventaja, ya que cuenta con dos cartones preventivos por tres de la selección de Bélgica, así que de empatar en marcador y no recibir más tarjetas que los Diablos Rojos, quedarían como punteros.
En caso de que tras el encuentro se empate hasta en número de tarjetas, la decisión de quién se quedaría como puntero del sector se dejaría al azar, con el lanzamiento de una moneda.
Será apenas la tercera vez que ambas escuadras se vean las caras en una Copa Mundial, con saldo a favor para Inglaterra, tras el empate 4-4 en Suiza 1954 y 1-0 en Italia 1990, con gol de volea de David Platt.
En total se han medido en 21 ocasiones, con solo una victoria para los belgas, que data de mayo de 1936, con un 3-2; mientras que los ingleses se han adjudicado siete de los últimos 11 enfrentamientos, la última de ellas en junio de 2012 con un solitario gol de Danny Welbeck, quien podría ver sus primeros minutos en este Mundial.
Otro duelo que se dará en la cancha será por el título de goleo, ya que Romelu Lukaku, atacante belga, cuenta con una anotación menos que el ariete británico Harry Kane, quien manda en la cuota goleadora del torneo, con cinco tantos.
Bélgica ha superado sus primeros dos cotejos con tres goles de diferencia, y en caso de repetir tal estadística en el partido ante Inglaterra, conseguiría ser la primera selección en lograrlo en la historia de las Copas del Mundo de la Federación Internacional de Futbol Asociación (FIFA).
Al igual que los Diablos Rojos, la selección de la rosa cuenta con ocho anotaciones, que es su segundo mejor registro goleador en un campeonato del mundo, solo por detrás de los 11 que lograron en toda la Copa de 1966, que organizaron en casa y en la que al final consiguieron su único título mundial.